La Caza De Brujas

★ Capítulo 6 ★

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Francia~Año 1480
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Sakura estaba durmiendo plácidamente en su cama gigante junto con su gato Salem, ninguno se percató de la hora, ya que, anoche Sakura había procurado limpiarse ella misma por haber visitado aquella iglesia de malas energías, también de crear un plan para esconder la puerta del sótano para los ojos de cualquier otra persona, solamente los brujos, brujas, personas con capacidad alta podían ver aquella puerta, pero un ser humano corriente, ni siquiera existía para sus ojos. Así que, se dedicó a pintar su puerta del sótano con pintura blanca desde el otro lado con un dibujo, se trataba de un hechizo parecido al disfraz que ella misma usaba para si misma. Acabó de acostarse a las tres de la madrugada, por eso mismo seguía durmiendo acostada casi semidesnuda por comodidad, las sábanas cubrían lo justo y necesario, dejando ver solo su espalda desnuda hasta su cadera, ya que, dormía boca abajo y todo su cabello rosado estaba desparramado por la almohada.

Pero se despertó al escuchar unos golpes desesperantes desde afuera, Sakura se tomó su tiempo en sentarse en la cama y vestirse rápido con su magia, al igual que se tuvo que poner el hechizo de disfraz para esconder su cabello rosa y su marca de bruja.

- ändra min bild, min fysik och dölja mig bland varelserna. - Mencionó su hechizo y su imagen cambio como todos la conocían. -

- ¿Qué sucede Sakura?- Salem se estiró apenas se despertó. -

- Salem ve al sótano y no salgas hasta que yo te lo diga. - Le ordenó a su gato negro para que se mueva, ya que, este seguía durmiendo en la cama como si nada. - ahora. - Sakura lo movió y Salem se quejó. -

- Voy. - Salem se bajó de la cama lentamente y caminó hasta la puerta del sótano, esperando que sakura le abra la puerta. -

- Tienes que hacer silencio. - Sakura le abrió, Salem entró y cerró la puerta rápido. -

Sakura se miró en el espejo esperando que nada estuviera fuera de lugar y abrió la puerta, la verdad esperaba que fuera él sacerdote, pero se relajó al ver que era Sarada, la cual traía el traje de su hermano en la mano doblado con sumo cuidado. Se había escapado de la casa sin que su hermano la vea, aparte de que su padre no estaba en casa porque tenía que trabajar en la panadería.

- Sarada, eres tú. - Sakura suspiró y se hizo a un lado para dejarla entrar. -

- ¿Te habías olvidado de que vendría temprano?- Sarada entró a su casa y miró todos los rincones posibles desde la puerta. -

- No, pero creí que llegaría primero el sacerdote Orochimaru para "bendecir y purificar" la casa. - Sakura usó la expresión de comillas. -

Sarada había pensado que la casa de una bruja estaría llena de pociones, libros, hechizos, señales de brujería, cuernos del diablo colgado como decoración, pero la casa de Sakura se veía normal, como cualquier otra.

- Cierto, entonces tenemos que hacer esto rápido antes de que él llegue. - Sarada miró a Sakura la cual se quitó el hechizo de disfraz delante suyo y se asombró. -

- Ta av dig den här förklädnaden, visa min verklighet och min fysik. - Sarada no había entendido ninguna palabra, la había escuchado decir algo parecido ayer. -

Pero fue más su sorpresa al ver su color de cabello rosado. Sabía que no había visto mal debajo de su capa en el bosque, realmente tenía el cabello rosado y no podía creerlo.

- Sabía que tu cabello era rosado. - Sarada miró su pelo emocionada como si fuera algo fantástico y sakura se lo permitió tocar. -

- Está es mi verdadera imagen, cómo soy en realidad. Mi cabello no es de color negro, simplemente me lo escondo para las demás personas porque todos siempre me señalan al ser extraño. - Sakura amaba su cabello, aunque no le gustaba el color rosado, le encantaba como quedaba en ella, pero lastimosamente no podía ir a ningún lado en su verdadera imagen -