★ Capítulo 24 ★

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Francia~Año 1480
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Todos los habitantes del pueblo se habían enterado de lo que pasó con la casa de los Uchiha, el rumor corrió rápido y comenzaron a decir que estaban malditos, ya que se trataba de una gran desgracia.

El demonio seguía estando en el pueblo asustando a los habitantes y causando desgracias. Nadie salía de sus casas por el miedo que tenían, ya había pasado 1 semana desde lo que pasó en la cantina y nadie parecía querer salir, solamente esperaban que el sacerdote pueda hacer algo o que pase un milagro para que el demonio se vuelva de nuevo al infierno.

Los únicos que salían y estaban afuera eran los cazadores de brujas, hacían patrullas intentando rastrear al demonio para acabar con él. Sasuke tenía que patrullar todos los días en la madrugada y de alguna manera se sentía observado por algo o alguien cuando estaba caminando por las calles. Era extraño, pero sabía que se trataba del demonio, simplemente que no lo veía. Cuando terminaba su turno, iba a la casa de los Haruno para dormir casi todo el día porque tenía el sueño cambiado.

El primer día le parecía extraño llegar a la casa de Sakura, en donde ella lo recibía con un breve saludo y se iba directamente a la cama a dormir de lo cansado que se sentía. Cuando se despertaba ya era tarde y no tenia demasiado tiempo para hablar con Sakura o quizás mantener una conversación con su hermana, tampoco veía al esposo de Sakura, por alguna extraña razón no lo vio desde que se comenzó a quedar allí, creía que quizás era por su trabajo. Pero la verdad se sentía muy tranquilo el hecho de que Sasori no se encuentre por ahí, ya que sería demasiado incómodo verlos ser los esposos perfectos, cuando había estado con Sakura detrás de la cantina porque básicamente ella le pidió que la haga suya por una poción.

No se animaba a sacarle el tema a Sakura, parecía como si fuera taboo, no quería ni siquiera recordarlo, aunque era imposible, necesitaba quitarse esos pensamientos de la mente porque no estaba bien lo que hizo, estuvo con una mujer fuera del matrimonio y además era casada. Si la gente se llegará a enterar de eso pronto hablarían mal, ya conocía como eran todos allí, así que esperaba que nadie se entere.

- ¿Estás despierto Sasuke? - Sarada había tocado la puerta de la habitación de Sakura, ya que él dormía allí pero solo, ella le prestaba su cama apenas venía y dormía hasta tarde. -

- ¿Sarada, qué ocurre? - Sasuke ya se encontraba despierto hace un rato, pero se había quedado en la cama acostado pensando en todas las cosas que pasaron en esos días. -

- Te extraño hermano. - Sarada pasaba menos tiempo con Sasuke desde que el demonio apareció pero porque él no dejaba de patrullar. -

Sasuke miró a su hermana menor y se sentó en la cama para intentar despertarse de una vez.

- Yo también Sarada, se que he estado muy distante desde que el demonio apareció, lo siento ¿Si? Prometo que apenas solucionemos esto, nos iremos de nuevo a vivir con nuestro padre en una nueva casa. - Sasuke también extrañaba a su hermana, como a su padre, no lo veía desde que lo dejó en la iglesia con el sacerdote, ya que no pasó a verlo y tampoco Fugaku se dignó a aparecer en la casa Haruno, pero porque era imposible salir a las calles. -

- Está bien Sasuke. - Sarada sonrió. -

- Por cierto, hoy no haré patrulla en el pueblo, Jiraiya me ordenó a mi y algunos cazadores de brujas que vayamos al bosque, tal parece el sacerdote siente una energía maligna que proviene de allí. Dice que pueden ser las brujas que trajeron al demonio. - Sasuke se levantó de la cama y comenzó a prepararse de nuevo para patrullar, aunque se sentía extremadamente cansado. -

La Caza De BrujasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora