What if? (Rin x Reader)

Capítulo XX: Acciones y sentimientos

"No other boy ever made me feel beautiful
When I'm in your arms, feels like I have it all".

SirLofi.

—Rin, suéltame—le pedí de nuevo. La voz se me quebró.

Me sentía mareada y no podía pensar con claridad. La situación en sí parecía irreal, pero no sabía cómo sentirme respecto a lo que él había dicho.

—No quiero. No puedo ver tu rostro de cerca tan seguido—me respondió él como si nada.

Entré en pánico.

Llevé las manos hasta mi espalda y le clave las uñas en los brazos sin el menor reparo. Se le escapó un grito de dolor y aflojó su agarre al instante. Me liberé de su abrazo para levantarme, alejándome de él como si tuviera Ébola.

Me miró con extrañeza mientras se sentaba en el suelo y se frotaba la piel para aliviar el ardor.

—¿Senpai?

—¿Cómo es que las facciones de una chica que te parece fea son "estéticas"?—le pregunté con la vista fija en el suelo. Si veía la cara de estúpido que de seguro tenía en ese momento me iban a dar ganas de golpearlo.

—¿Yo cuándo dije que me parecías fea?

Ya me suponía que iba a negarlo, como de costumbre.

—Cuando nos conocimos y dijiste "¿Yo, con ella? Ni hablar" o cuando Kunigami te preguntó si yo te gustaba y tú le dijiste "No hay nada en ella que me tiente a perder el tiempo en cosas como esa", por ejemplo—le recordé con molestia.

El muy maldito suspiró con cansancio mientras se ponía de pie, aún frotándose los brazos.

—En serio tienes que dejar de malinterpretar lo que digo.

—Ah, pues disculpa. Ilumíname entonces—ironicé—. Porque si dices que jamás tendrías algo con una chica a la que acabas de conocer, es porque no te gusta su físico.

—Senpai, hubiese dicho eso si estuviese hablando de, no sé, Nicole Kidman—me respondió, poniendo los ojos en blanco—. Tu físico no influyó en nada, hubiese dicho lo mismo de cualquier chica. Y respecto a lo de tu novio, sé que te dije lo mismo a ti al día siguiente, pero en realidad estaba tratando de convencerme a...

—Y bien, ¿Qué es tan importante como para que Nanase vaya corriendo a la casa del club y me traiga aquí a rastras?

Dejé de prestarle atención a Rin cuando escuché la voz de Ego. Estaba de pie en la entrada del almacén, rascándose la sien con expresión indiferente. Nanase estaba agazapado detrás de él como un perrito asustado.

—Es que escuché que T/N-senpai le gritaba a Rin-kun que la soltara. Y sé que él a veces se juega muy pesado con ella, así que...

Ah, pues gracias, Nanase. Si Rin hubiese estado asesinándome, no le hubieses dado tiempo de ocultar el cadáver.

Una reacción muy rápida de tu parte.

—T/N-chan, ¿Qué ocurrió?—me preguntó Ego en tono condescendiente.

Era obvio que le importaba un comino lo que me hubieses hecho Rin.

—No es nada, Rin se me acercó por detrás para asustarme...

—Iba a ayudarte a tomar la escalera porque tú no alcanzabas—me interrumpió, pero yo lo ignore.

—Y terminamos cayéndonos los dos. Pero como bien dice Nanase, a él le gusta jugarse pesado y no me dejaba levantarme. Eso fue todo.

Ego alzó la barbilla y creí vislumbrar algo de suspicacia en su mirada.

—¿Fue todo?—inquirió. Apreté los labios y asentí con lentitud. En ese momento Kunigami apareció corriendo detrás de ellos. Se detuvo a una distancia prudente y su mirada osciló entre todos los presentes, intentando averiguar qué había ocurrido sin tener que interrumpir—. Te lo preguntaré de otra manera. ¿Rin intentó propasarse contigo o te lastimó físicamente?