The Last Wish | Taekook

22

30 de diciembre de 1981

Otro fin de año había llegado. Taehyung cumpliría 20 años, ¡yei! Comenzaba otra década en su vida. Sus vacaciones habían comenzado la semana anterior, así que no tenía que preocuparse por levantarse temprano y salir corriendo a la universidad. Bueno, "temprano" es un decir, porque sus clases iniciaban a las 9am, pero siempre era bueno dormir ocho horas completas, ¿no es así?

Jungkook se sentó al lado derecho de la cama mirándolo dormir. ¿Cuánto tiempo más tardaría en levantarse? Eran ya las 11am. A este paso se saltaría el desayuno y de frente almorzaría.

"Hyung", llamó. El rubio hizo un sonido con los labios y abrazó más la almohada en la que se echaba. "¿Taehyungie? ¡Levántate! Hyung, hyung, ya son las once de la mañana." Jungkook empezó a sacudir el cuerpo del mayor, pero él seguía más tieso que un tronco.

"Jungkook-ah, ¿no ves que ya soy un viejo? Me cuesta levantarme temprano."

"Hyung las personas mayores duermen menos que los jóvenes, ¿sabías?"

Taehyung se sentó y empezó a sobar sus ojos. Jungkook lo miraba sonriendo; los cabellos del mayor estaban todos desordenados y con el polo grande que llevaba puesto se asimilaba a un niño.

"Feliz cumpleaños", dijo Jungkook dándole un abrazo. "Cuidado que te empiezan a doler los huesos porque no me alcanza el dinero para una silla de ruedas." Bromeó.

Después de unos minutos, se levantaron y cuando llegaron al lobby de su departamento, estaban ahí sentados Park Hyungshik y una chica de cabello negro, lacio y largo. Hyungshik era un amigo suyo de la universidad, fue el primero en hablarle cuando entró a la facultad y se habían vuelto algo cercanos.

La chica tenía ojos redondos y grandes. Era muy bonita. Tenía los labios ligeramente gruesos y la nariz pequeña. Ella parecía tener ganas de llorar cuando lo vio, pero él simplemente no podía entender por qué. La chica se levantó de su asiento y se fue corriendo hacia Taehyung para abrazarlo.

El chico se quedó anonadado, pero le devolvió el abrazo y cuando miró hacia abajo para verle el rostro, le llegó un déjà vu.

"Taehyung-ah, ¿te gusta?"

"Claro que sí, Taewoo, ¿tú lo hiciste?"

"Sí, mamá estará contenta si lo ve, ¿no es así?"

"Sí, si ya me alegraste el día a mí también. Eres una niña muy inteligente, ¿lo sabes?"

Taehyung sintió su pecho doler y la chica no dejaba de llorar. ¿Podía ser realmente...?

"¿Taewoo?" La chica levantó su rostro y lo miró. "Mierda, te busqué por tanto tiempo... tú- ¿Dónde estuviste?"

"Eso no importa, ¿no lo crees? Lo importante es que ahora estoy aquí."

Los cuatro salieron a las calles para ir a comer algo. Hacía algo de frío pero era soportable. La verdad era que Hyungshik había conocido a esa chica hacía unos años. Ella había vivido con una señora por muchos años. Esa señora se llamaba Myunghee; ella la había encontrado una noche, caminando sola por la calle y se la había llevado. La niña tenía apenas unos cinco años, y nadie nunca la buscó, ¿quién sabe qué cosas le pudo haber pasado si la dejaba para su suerte en las calles? Ambas necesitaban algo. Taewoo a una madre, alguien quien la cuidase, y Myunghee necesitaba alguien que la acompañara en una fría noche. Se había vuelto su figura materna. Y le agarró cariño durante los años. Pero ella era una mujer mayor, y cuando Taewoo cumplió los catorce años, ella falleció. La persona a la que llamó mamá por la mayor parte de su vida se fue. Y entonces, a esa corta edad, ella ya había perdido toda la familia que alguna vez tuvo.