No soy un niño - Saitama y Genos (Traduccion)

Capitulo 32: Te amo

Después de 4 meses xD al fin

"Ahhh, mierda, Genos, voy a.... Agh!"

Las palabras de Saitama resonaron a través de la habitación a un volumen alarmante mientras la hábil boca de Genos lo trabajaba de arriba a abajo bajo las sábanas, llevándolo a otro orgasmo revolucionario. Genos tragó la carga de su amor voluntariamente, y en poco tiempo el único sonido que se escuchó fue una respiración pesada.

"Mira," jadeo Genos, tirando de las sábanas que cubrían su cabeza para que pudiera ver la cara ruborizada de Saitama. "Te dije que podías volver a correrte, ¿no te lo dije?"

Saitama sonrió a su joven amante, notando el brillo de sus ojos. Genos estaba tan lleno de emoción y vida. Era un fuego que nunca se extinguía, e iluminó el mundo de Saitama.

"Sí, supongo que tenías razón."

Los dos se sonrieron dulcemente, y antes de que Saitama tuviera tiempo de componerse, Genos se movió hacia arriba y envolvió sus brazos alrededor de él. El hombre se sentía tan cálido en los brazos de Genos, pero sobre todo se sentía seguro y feliz.

Los suaves y rubios mechones del pelo de Genos cosquillearon la parte posterior de la cabeza de Saitama, y Saitama se mareo aún más el sutil aroma del coco.

"¿En cuántas habitaciones lo hemos hecho hasta ahora?" preguntó Genos emocionado, hablando en voz baja al oído de Saitama.

El profesor pensó por un momento: Habían tenido sexo en la mesa, Genos montando la polla de Saitama en un repentino cambio de dominio. Entonces Saitama había doblado a Genos sobre el mostrador de la cocina y se lo había follado hasta que casi se partió por la mitad. Después de venirse tan duro dos veces seguidas, Saitama estaba seguro de que estaba agotado, sin embargo, mientras los dos trataban de llegar al dormitorio, Saitama había arrojado a Genos por las escaleras, tomando tanto como podía de su todavía dura polla en su boca hasta que el chico se corrió en su garganta, gritando su nombre en un mantra. Finalmente llegaron a la cama, y Genos hizo todo lo posible para convencer a Saitama de que podía ir a otra ronda, bajando a través del cuerpo de su amor y demostrando tener razón. Cuando Saitama maldijo en el aire cuando se vino, Genos se sintió victorioso.

"Técnicamente cuatro habitaciones," dijo Saitama "si cuentas las escaleras."

Genos sonrió, plantando un tierno beso en el cuello de Saitama. "Sí, cuento las escaleras. Entonces son cuatro." El chico suspiró felizmente, apretando a su profesor. Su corazón palpitaba cuando escuchó a Saitama prácticamente ronronear en respuesta. "Cuatro veces," el tono de su voz era de ensueño, y acarició su labio inferior arriba y abajo de la piel lisa en la parte posterior de la cabeza de Saitama. Era extraño, pero íntimo. "Recuerdo haberlo imaginado tantas veces. Suspirando por hacerte el amor, aunque fuera solo una vez, y aquí estoy, ¡haciendo el amor contigo cuatro veces en una noche!"

Saitama estaba contento de que estaba mirando hacia otro lado de Genos, porque sus mejillas comenzaron a brillar de color rojo brillante. "Bueno, no nos encargamos exactamente de cada habitación de la casa, ¿verdad?"

"No importa," sonrió Genos. "Hay mucho más tiempo para eso." Tenían el resto de sus vidas para completar su misión, y honestamente a Genos no le importaba si alguna vez follaban en cada habitación o no. Mientras pudiera estar al lado de Saitama no le importaba.

"Supongo que tienes razón," contestó Saitama, rizando los dedos de los pies para acariciar las suaves piernas de Genos. Se sentía caliente, y podía sentir las primeras olas de cansancio comenzar a bañarse en él mientras se acurrucaba en el marco más pequeño de Genos. Estaba a punto de sugerir ir a dormir, pero fue cuando Genos habló.