Bajo mi piel. Sandra Sánchez. CAPÍTULO 28.

1.1K 57 29
                                    

CAPÍTULO 28.

El teléfono de la habitación empezó a sonar. Luca se removió en su sitio. Lo tenía pegado a mi costado como una lapa. Una mano estaba sobre mi cadera y la otra debajo de mi cabeza. Si Matt lo veía de esa forma, no quería ni imaginar lo que le iba a hacer. El teléfono fijo no paraba de sonar. Estaba en el lado de Luca, así que no podía descolgarlo. Intenté apartar a mi amigo, pero pesaba demasiado. Me acerqué a su oído y le susurré algo que seguro que le hacía despertar.

- Luca, me han dicho que hay una rubia despampanante esperándote en la recepción.

- ¿Eh? ¿Dónde? ¿Dónde?

Mi amigo abrió los ojos rápidamente y me miró. Reprimí una carcajada al verle. Había sido muy cómico. Se había sentado en la cama en cuestión de segundos y miraba a todos lados buscando a esa mujer fantasma. Él nunca desaprovechaba ninguna ocasión aunque estuviese dormido el muy descarado.

- El teléfono no para de sonar, anda cógelo. - Dije riendo.

- ¿Te crees muy lista no? - preguntó pasándome el teléfono de mal humor al darse cuenta de mi estratagema para despertarlo. - Como te azote se te va a quitar la tontería.

Hice un mohín y contesté a la llamada.

- ¿Diga?

- Buenos días preciosa, ¿puedo entrar?

Era Matt, me extrañó que llamase avisando. ¿Desde cuándo me pedía permiso? A lo mejor pensaba que Luca y yo habíamos hecho algo y no quería descubrirnos, o quizás era porque sabía que ambos dormíamos en ropa interior y eso le incomodaba. En tal caso, me gustó que lo hiciese. Ya había dado un pasito adelante con ese simple detalle. Estaba respetando cada vez más y más mi relación con Luca.

- Claro que sí, aunque Luca sigue aquí.

- Entonces esperaré a que se marche.

- No pasa nada, ven si quieres.

- No, mejor un poco más tarde. Luego te veo.

- Matt, ¿Estás de buen humor? - Pregunté poniéndome el albornoz.

- Estoy caliente nena, y hay un hombre en tu cama, así que esperaré solo unos minutos.

Y colgó el teléfono. Sonreí como una boba y miré a Luca. Me encantaba no tener que esconder mi relación con Matt enfrente de él. Sinceramente, ahora que lo sabía pensaba que había sido una idiotez de mi parte no querer decírselo desde el principio. Luca siempre había sido una persona muy comprensiva y aunque supiera que iba a meter la pata en algo, él me apoyaba igualmente y estaba ahí para levantarme cuando me caía.

- Ya me voy. - Dijo sin necesidad de que le explicase nada.

- Gracias.

- ¿Nos vemos para almorzar? - preguntó vistiéndose. - Tengo ganas de pasar tiempo contigo.

- Claro que sí. Luego paso a buscarte. Te quiero.

Le acompañé hasta la puerta después de que acabase de vestirse. Estaba ansiosa por que se marchase y volar hasta la habitación de Matt, pero no quería ser grosera. Le había echado de menos y me encantaba estar con él, no quería que pensase que eso había cambiado.

- Yo también bebé. Saluda a Conner de mi parte. - Sonreí.

- Lo haré.

- Ah, Mia... - llamó mi atención justo cuando iba a cerrar la puerta. - Que sepas que llevas las bragas por los tobillos.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: May 26, 2015 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Bajo mi piel.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora