🫀━━━━𝔠𝔬𝔫𝔰𝔢𝔮𝔲𝔢𝔫𝔠𝔢𝔰

694 71 4
                                    

XVII

» 𝔡𝔬𝔫'𝔱 𝔱𝔯𝔲𝔰𝔱 𝔞 𝔴𝔬𝔩𝔣 𝔲𝔫 𝔴𝔬𝔬𝔩𝔢𝔫 𝔠𝔩𝔬𝔱𝔥𝔢𝔰«

—𝕰stamos literalmente en el fondo del Barril...

—¿Cómo siempre, no?

—La stadwatch no patrulla aquí, así que estamos seguros. Inej ¿Qué descubriste?

La morena apareció detrás mío y amablemente me dió cuchillos nuevos. Ya me estaba acostumbrando mejor a sus juegos, a diferencia de Jes que dramatizó un poco el susto.

—Nos acusan de matar a Tante Heleen.

—¿Ya tenemos esos problemas? ¿Me estás jodiendo?

—Nosotros no fuimos. ¿O si fueron ustedes? Lo siento, pero desconfío de algo así más de Svane que de tí Inej.

—Wow, esa fue una gran impresión, Jesper, Estuve contigo desde que bajamos...

—Lo que quiero decir es que te veo más capaz de matar a alguien como Tante.

—Fue Pekka Rollins ¿Verdad? Nos incriminó.

—Quería castigarnos, por aceptar el trabajo a pesar de advertirte.

—Pero ¿Por qué a Tante?

—Para poseernos— dije mirando la tierra bajo mis pies y lo sucia que estaba mí falda ahora. —Él fue quien me entregó a Heleen, cuando me apresó, me quiso de vuelta apenas encontró que trabajaba para Kaz... Además...

—Tenía las escrituras del Club. Hicimos un trato para que ambas nos ayudarán y Rollins la mató.

—Es dueño del club, ahora— confirmó Inej.

—Mierda.

—Entonces...

—¿Para qué es esto?— dije al recibir unos cuantos billetes del trato con Sturmhond.

—Ya que están buscando a su sankta y la recompensa subió... es un boleto para que la protejan. Vayan al tercer puerto y busquen a Jari...

—¿Qué crees que estás haciendo?

—Las sacará en un barco.

—¿Estamos fuera?

—Les prometí libertad.

—Esto no es libertad, nuestros contratos los posee Pekka.

—Ya me encargaré. No es su pelea. Es mía— dijo, yéndose.

—¡Kaz!

—No te dejaré— replicó Inej. —Lo que pasen los sanktos es destino, nosotros hacemos el nuestro.

—Bien... Pero quédense en las sombras ¿Me oyeron? Nos vemos luego, a las dos campanadas al final de Rozenstraat. Busquen un taller si se separan de Svane, ella ya conoce el camino.

—¿Adónde irás tu?

—Necesito un Mortificador, uno que aún no posea Pekka, y... que sea experimentado para lo que se venga... Estén atentos.

—¿Un mortificador?

—Iré— dijo Inej.

—Yo ansío el baño, pero creo que primero comeré— dije siguiéndola, y dejando a Jesper hablando solo.

. . .

Al finalizar de comer un envuelto de higos, me encaminé al taller. Entré por una ventana superior, cayendo en un gigantesco armario, para bajar hasta la cama de Wylan.

OWNLESS〰kaz brekkerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora