Se quedó tirado en el suelo, no tenía cómo levantarse, las fuerzas necesarias para mover sus músculos se habían evaporado, las órdenes que su cerebro tenía que mandar a su cerebro para que sus terminaciones nerviosas movieran sus músculos... no llegaban. Quería que su cerebro actuara con rapidez, que le diera una solución, algo con lo que escapar pero seguía perdido en el miedo, parecía inútil, se sentía inútil mientras arrastraba sus piernas hasta su pecho y hundía su rostro sobre ellas abrazándose, las lágrimas finalmente lo abordaron.
***
Caminó hacia la salida del instituto feliz, por fin comenzaba a sentirse satisfecho después de semanas observando a Luhan salirse con la suya.
Se tomó su tiempo viendo como ese pequeño traidor se escondía tras las faldas de Sehun y Kyungsoo, un lugar donde no podía tocarlo, un lugar donde no era capaz de actuar racionalmente, por eso había decidido cambiar de estrategia si quería vengarse de Luhan, tenía que separarlo de sus guardaespaldas, quería que sufriera en silencio como él lo había hecho, quería que sintiera lo mismo que sintió cuando no tuvo a nadie a su lado para contarle cómo se sentía cuando se dio cuenta que amaba de verdad a Kyungsoo y la había cagado hasta el fondo.
El no era Sehun, no tenían nada que ver el uno con el otro, no podía actuar como él para traerlo de vuelta, no podía doblegarse, a él le gustaba ser posesivo, a él le gustaba que su pareja fuera solo suya y no se acercara a nadie, no sabía mostrar el cariño ni la delicadeza necesaria para decir las cosas, no sabía cómo decir lo que de verdad sentía porque ni siquiera el mismo era capaz de darse cuenta a tiempo de lo que quería, pero eso no lo convertía en el monstruo que Luhan le había transformado a los ojos de Kyungsoo, eso no le daba derecho a Luhan de culparle por sus propias trampas. Ahora estaba cabreado, su sangre hervía, le dolía el corazón por tanta ira acumulada, su cerebro chirriaba de forma molesta siempre que pensaba en ese desgraciado.
Volvió a su casa dispuesto a esperar a Luhan, esta vez cumpliría con sus condiciones porque el precio a pagar era más alto. Sehun, sabía que para Luhan su propia vida no valía nada ¿Qué podía valer la vida de alguien que se abre las piernas con cualquiera? Por eso no le importaba que se vengara, por eso no temblaba ante sus amenazas así que tenía que buscar algo que valorase más que su propio bienestar ¿y qué mejor que las únicas personas que cuidaban de él?
Llegó a casa, comió algo antes de subir a su cuarto, se quitó la camisa y se tiró sobre la cama para dormir, estaba cansado de tanto entrenamiento y deseaba estar fresco antes de la llegada de Luhan, porque pensaba disfrutar de toda la frustración acumulada sobre su cuerpo toda la noche y los días que venían antes de hundirle en la más profunda de las oscuridades.
- ¡Despierta imbécil!- escuchó un grito antes que algo estampara contra su cara.
Se despertó de golpe confundido, buscando el lugar donde provenía el golpe... la voz y se encontró a su invitado parado frente a su cama con los brazos cruzados sobre su pecho.
- Aquí estoy, así que dejarás en paz a Sehun... y a DO- dijo con la cabeza en alto.
No pensaba mostrarle que había estado llorando hasta que ya no le quedó ni una gota de lágrima en el cuerpo. Lo odiaba, detestaba al capitán pero no podía decir nada, porque sabía que él lo había traicionado también, sabía lo que le hizo perfectamente y no necesitaba de nadie para recordárselo, lo usó para salvarse del odio de Sehun, lo usó para no quedarse solo porque no le quedaba ninguna alternativa. Podría sentirse peor si Kai no hubiera sido un cabrón que recabara en su pasado, entonces puede que se hubiera arrepentido, se hubiera sentido como una mierda pero... Kai no había sido así, él había tocado una parte de su vida que deseaba con desesperación olvidar.
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Juguete de dos (SeSoo & KaiLu) Wattys2015
RomansaSeSoo La vida de Kyungsoo se tuerce cuando el subcapitán del equipo de baloncesto, Sehun, lo encuentra follando con el capitán Kai, y no contento con verlos en un momento íntimo, les hace una foto. Desde ese momento, el subcapitán le da a escoger a...