Algunas Verdades

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Asteria estaba cansada, sentía el peso de las decisiones sobre ella. Observó a la pareja de elfos en el suelo, a los soldados heridos, los daños en el bosque y la mirada de Aksel qué esperaba sus ordenes "¿Donde estaban sus días pacíficos como empleada asalariada?" volvió a poner su mirada en la mujer, el elfo había perdido la consciencia hace un rato así que lo descarto "¿qué hacían ellos en este lugar?"

"Tu nombre mujer elfa ¿Cuál es?"

La mujer levanto la cabeza y parecía dudar si responder o no, apretó más el cuerpo en sus brazos. Mirando alrededor asteria se sentó en una piedra cercana, acomodo al niño en sus brazos qué se negaba a soltarla de manera que quedo sentado con las piernas envueltas en su cintura y los brazos en su cuello, aunque le preocupaba que no había dicho una sola palabra en un rato lo dejo ser, acarició su espalda de arriba a abajo. Aksel se movió con ellos parándose a su lado, le sonrió, el también parecía sobrepasado por la situación ninguno espero que una escursion para talar árboles terminará en esto, volvio a concentrarse en la mujer.

"No estas en posición de decidir si permaneces en silencio o no, el territorio en el que estas justo ahora me pertenece, tu compañero ha atacado indiscriminadamente a mis caballeros, incluso estoy segura que los problemas causados recientemente son causa suya, los espíritus de este bosque lo reconocen como el origen de sus problemas. Si no me he encargado de ustedes es por la intervención de mi hijo"

Sintió que bastian la apretaba cuando termino la frase y su cuello se sintió húmedo "¿estaría asustado aún?" se mordió el labio, era la primera vez que se refería así misma como su madre en voz alta "lo habría molestado" lo arrullo de nuevo y no paro las caricias en su espalda esta vez, continuo hablando.

"Te aconcejo qué no pierdas tal favor, ahora mismo eres la única que puede ver por tu compañero, de tu desicion depende la resolución de esta situación"

"Oficialmente se sentía como un perra, y no cualquiera, la más mala de las malas" jamas pensó que se metería en una situación así "ella estaba amenzando a una mujer invidente qué además intentaba cuidar de su compañero" eso no se sentía muy bien que digamos. Pero carajo, ella misma también era responsable de un territorio ahora, de otras personas, de unos niños. Desde que había comenzado a vivir esta vida, no había sentido tanto el peso de sus responsabilidades como en este momento "¿tendría más situaciones así en el futuro? por dios, ella casi mata a un hombre hoy" lo que le dolió, fue que no  sentía arrepentimiento por ello, el se había metido con su niño lo merecía y ella estaba dispuesta a protegerlos se lo había planteado desde esa noche que hizo las pases con la vida que había aceptado vivir, salió de sus pensamientos cuando la mujer hablo.

"Idril, mi nombre es Idril y mi marito porta el nombre de Caranthir"

"¿por que han venido al norte?"

"No sabía que este era el norte, mi esposo y yo solo queríamos un lugar para refugiarnos un tiempo"

La miro, era hermosa a decir verdad "Carajo, es que todos los personajes eran hermosos en ese lugar incluso los tipo bestia tenían su misticismo animal" de repente, récordo la historia del soldado "un elfo jefe del sur contrato al mercenario para buscar a su hija secuestrada" "la información decía que huyeron al norte"  la estudio parecía muy bien atendida para ser cualquier elfa.

"No pareces estar muy secuestrada o por lo menos no en contra de tu voluntad, señorita elfa del sur"

"¿Que?" Aksel arrugó la cara y la miro, varios de los soldados también se fijaron en la elfa "¿por que estaría una noble en un lugar así, si no es en contra de su voluntad?" asteria se rio, su cara era todo un poema "chico, ¿no había unido los puntos?"  aun cuando era inteligente era tan inocentes con algunas cosas

Transmigre, Al Diablo Con La Trama. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora