Una vez que toda la "familia" llegó, la fiesta siguió en el jardín.
Este se encontraba todo decorado con globos y juegos infantiles, además de un enorme castillo inflable, un tobogán, e incluso un trampolín. Habían armado un larga mesa para los adultos, y a unos pocos pasos una más bajita y pequeña para los niños. A un lado se podía ver una chica quien se encargaba de pintar los rostros de los pequeños, con diferentes temáticas. El cumpleañero claro que tenía un dinosaurio.
Con Moon-sik estamos los dos uno al lado del otro.
- Tengo la urgencia de tirarme por el tobogán. - murmura.
- Por favor no, ya veo que se desinfla y haces llorar a los niños.
- ¡Ey! - se queja con fastidio, consiguiendo que se me escape una carcajada por la indignación con la que me mira. - ¡Son muy resistentes!
- Voy a fingir que no he venido contigo si te veo allí arriba.
- Si me subo allí arriba voy a llamarte a gritos y saludarte.
- Y yo le voy a pedir que Nari que tenga la cámara de su celular lista para grabarte y subirlo a tú perfil de instagram.
Pone los ojos en blanco. - Que aburrido eres. - refuña. - Te iba a proponer que subieramos juntos. Se que no te gustan las alturas.
Nuestra conversación es interrumpida cuando veo a mi sobrino correr hacia nosotros, con esa amplia sonrisa.
- ¡Tío Moon, ven! - Ryu lo toma de la mano y lo lleva consigo, a lo que él se deja. - Juega con nosotros.
Moon-sik se vuelve hacia mí. - ¡Me ha dicho tío! - exclama en un susurro, con sus ojos bien abiertos y una sonrisa infantil.
Río. - Hasta los niños te adoran, Jagiya. - comento divertido mientras lo veo alejarse junto a los demás pequeños, quienes están eufóricos porque un adulto juegue con ellos.
- ¿Qué significa eso? - pregunta una voz a mi lado, sorprendiendome.
Giro mi cabeza y veo a Astor Marshall parado junto a mi.
¿De dónde diablos sale que siempre se aparece de forma tan misteriosa?
- Eh... es como "cariño" en coreano. - respondo seco.
Asiente levemente y noto algo raro en su mirada, la cual se volvió "apagada" en comparación ese primer encuentro en el jardín. Tiene unos ojos muy expresivos. Y no se por que cada vez que hablo con él, o le respondo algo, siento como si mi respuesta lo decepcionará. Como si no fuera lo que esperaba oír. Lo que es bastante frustrante.
- ¿Hace mucho que están juntos? - pregunta con curiosidad.
- Depende que consideras mucho.
Menea la cabeza. - Pues mi relación más larga fue con la mamá de Lily, mi hija. Que duro... 1 año.
Oh vaya... tan solo un año es lo máximo que ha durado. Se ve que las relaciones no son lo suyo.
- Mi relación más larga ha sido con Moon-sik, y llevamos.... 7 años. - comento. - Aunque lo conozco hace casi 10 años.
- ¿¡7 AÑOS!? - exclama muy sorprendido. Queda en silencio, pasmado. - No sabía que tanto... - murmura como para sí mismo.
¿Y por qué habrías de saberlo? - quiero reprocharle, pero decido mejor cambiar de tema.
- ¿Tú hija se llama Lily? - pregunto en cambio.
E instintivamente se le forma una enorme sonrisa. - Si, Lily. - responde con orgullo. - Lily Marshall.
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Regresa a Mi (Mafia Marshall VII)
Romance¿Qué pasará cuando se mezclen el pasado que creía olvidado por completo, y su nuevo presente?