🆆︎🅰︎🅽︎🆃︎🅴︎🅳︎ (𝙇𝙄𝘽𝙍𝙊 𝙄 𝙮 𝙄𝙄)

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-¿Ese no es tu ligue de la semana pasada?- preguntó Corine viendo pasar al doctor Roidve. Llevaba la bata de la clínica y un café en la mano. Su mirada coincidió con la mía cuando me guiñó un ojo, a lo que respondí enarcando una ceja divertida. Desvié la mirada para mirar a mis acompañantes y me metí una patata frita en la boca. Las regañé con la mirada.

-Si quedo vosotras es para que charlemos de la vida en general, el clima, las noticias, lo que queráis mientras no se trate de mi vida personal.- repliqué mirando a Corine. Nathalie rodó los ojos al escucharme, desaprobando lo que le decía.

-La vida en general, da asco.- sentenció dando un sorbo a su bebida. Corine la apoyó sonriendo y señalándome.

-En efecto, no sé cómo lo haces, pero tu vida personal es alucinante, te tiras a tíos guapos sin...

-Sigo aquí.- repliqué seria. Ellas bufaron y me imaginé que el hecho de que sacasen este tema era por algo.-¿Porqué no podemos hablar de otra cosa?

-Porque Corine ha visto como te miras con el novato.- confesó Nathalie sonriendo. Miré a Corine para ver si era cierto y me encontré con como regañaba a Nath con la mirada. Claramente no esperaba que ella fuera una bocazas.

-Si es que ya sabía yo...- susurré por lo bajo.- El novato es guapo, pero tampoco está para tirar cohetes.

-Está para tirar cohetes, naves espaciales y trasbordadores si hace falta.- afirmó Nathalie sonriendo. Rodé los ojos y les señalé el restaurante que teníamos justo en frente.

-Ahí iremos esta noche.- avisé cambiando de tema. Corine sonrió y tuve que volver a recordarle porque íbamos dándole un pequeño toque en la cabeza.- Es por trabajo, guapetona.

-Ya, pero habrá tíos buenos seguro.- dice sonriendo. Me terminé las patatas e inspeccioné el local al que íbamos esta noche. Ayer y anteayer intentamos en el primer bar y no tuvimos suerte, así que hoy probamos con el segundo bar.

Dejé un billete de 20 para que pagaran y me levanté. Me tocaba invitar a mí, pero...

-Si es falso, puedes quedartelo.- replicó Nath.- Ya pagamos nosotras, tacaña.

...me di la vuelta sonriente y cogí mi billete, aunque antes de irme lo agité en el aire.

-Esta vez era real, pero si tanto insistís.

Pondré el contexto. La última vez que las invité me dió por poner un billete falso, al entregarlo al camarero se dieron cuenta de que no era real y tuvieron que pagar ellas. Sólo lo hice una vez y desde entonces...

Mentira, lo has hecho 3 veces. Por eso no se fían de ti.

Bueno, lo que importa es que hoy tenía la verdadera intención de pagar, pero ya que ellas se han ofrecido, ¿quién soy yo para oponerme?

Caminé rápido para llegar a la comisaría. Eran cerca de las dos y empezaba mi turno en nada. Entré en la sala y ya estaban Charles, Jean y Kai. Todavía ni rastro de Milo.

-Hola, chicos.- saludé sentándome en mi escritorio. Kai levantó la cabeza de un libro que estaba leyendo para sonreírme, Charles levantó una mano con pereza para corresponder a mi saludo y Jean, siguió tecleando en su ordenador después de soltar lo que yo creo que fue un gruñido.

Estaba quitándome el abrigo cuando noté como Kai se levantaba acercándose a donde estaba.

-¿Siempre son así de habladores?- preguntó en inglés. Sonreí dejando el abrigo en la mesa.

-Sí, puedes echarle la culpa a que la mayoría somos informáticos. No esperes que hablemos mucho. Aunque yo diría que es más miedo a Will que otra cosa.- repliqué haciendo que sonriera divertido. Entraron Corine y Nathalie.