Jack era un gran tipo. Era uno de esos tipos que tenía tatuajes cubriéndole cada centímetro de ambos brazos, el pecho y la espalda. Era un artista como yo, y exponía su trabajo con orgullo. Sus ojos negros combinaban con su largo cabello negro, el cual llevaba usualmente en una coleta. Comenzó con el nombre de Sam en mi muñeca izquierda. El picor era soportable. No me malinterpreten, se sentía como cientos de alfileres diminutos que pinchaban, pero yo había pasado por cosas peores. Después de un par de horas, Jack había terminado finalmente.
Miré mis muñecas y sonreí.
—La rojez desaparecerá en un par de días, sólo asegúrate de humectarlas, así la comezón no será tan mala.
—Gracias Jack, son hermosos.
—¿Quieres un aventón a casa? —preguntó.
—Llamaré un taxi.
Miró el reloj. —Es medianoche; le diré a Donny que cierre y te llevo a casa.
Sonreí. —Está bien, Jack, en serio, sólo llamaré un taxi.
Agarró su abrigo, le gritó a Donny que cerrara y me dijo que me montara en su coche.
—Si no me equivoco, tú vives cerca de mi novia, y de todos modos me dirijo hacia allí, así que no es problema.
Entré a mi departamento, y la primera cosa que hice fue agarrar mi laptop, cambiar mi ropa por mis pijamas, trepar a la cama y abrir el correo. El primer paso para seguir adelante con mi vida era disculparme con Sam, y le debía una enorme disculpa. Apreté el botón de redactar y salió una página en blanco:
Querido Sam:
Espero que estés leyendo esto y no lo hayas borrado antes de abrirlo cuando viste mi nombre. Si lo estás, entonces verás que esta es mi disculpa hacia ti de todo corazón. Las palabras no pueden explicar cuánto lo siento por no contarte sobre mi enfermedad desde el principio. Nunca tuve intención de acercarnos tantos por esa misma razón. La noche en que te llevé a casa tenía intención de marcharme y no mirar atrás; si lo hubiera hecho, no nos habríamos conocido y ahora no estarías resentido.
Nunca me perdonaré el no haberte contado la verdad. Creo en el destino, y fue este quien nos acercó. Te dije que fui salvada por una razón, y creo que fue para salvarte a ti. Tienes un corazón y alma hermosos, y no mereces el no amar a nadie. Nunca sabrás lo que has hecho por mí y cómo has cambiado mi vida. Nunca hubiera experimentado el amor del modo en que lo hice contigo, porque lo que me mostraste y me hiciste sentir fue la primera vez en mi vida. Nunca amé a Kirk.
Estaba con él porque estaba ahí y tenía miedo estar sola. Es todo lo que ha sido mi vida, soledad. Mi decisión de no tener tratamiento en el momento fue por puro egoísmo de mi parte, y ahora es que lo he comprendido. Quiero agradecerte por tu amor y tu bondad. Si me quedara un último aliento, lo usaría para decirte lo mucho que te amo, porque lo hago y siempre lo haré.
Con amor por siempre, Mon.
Las lágrimas cayeron por mi rostro mientras apretaba enviar. Inhalé, cerré la laptop y me dormí. Me puse un par de leggins, el suéter largo rosa pálido y las botas negras. Me ricé algunos mechones de cabello corto y me puse un poco de maquillaje por primera vez desde Michigan. Abrí la laptop y revisé el correo, nada. No esperaba que hubiera una respuesta de ella, pero una podía soñar.
Llamé un taxi y me dirigí a la oficina del doctor Taub para la extracción de sangre. Examiné mis muñecas y sonreí ante la belleza del nombre de Sam y el símbolo del infinito. Entré al edificio de oficinas y tomé el elevador hacia el cuarto piso.
ESTÁS LEYENDO
Gap The Series Para Siempre
Fanfictioncuando Mon se mudó con su novio a Nueva York, pensó que vivirían felices para siempre en su pequeño apartamento de Nueva York. Nunca pensó que él empacaría sus maletas y se iría porque "necesita espacio". Con su recién descubierta soltería y el mied...