Amaia

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Despierto y al segundo recuerdo dónde estoy. 

Suspiro profundamente. 

Wow. 

¿de verdad me trajo en brazos? 

¿de verdad me masajeó los pies?

¿de verdad me acaricio hasta quedarme dormida? 


Sé que no debería. 

No debería enamorarme de mi jefe a tan solo un mes de conocerlo. 

Pero... 

Jo. 

Lo que sí estaba segura es que no quería un rollo de una noche, eso seguro, por dios, trabajamos juntos. 

Pero... el seguir conociéndole, pasar momentos juntos, risas... lo cambia todo. 

Creí que sería siempre para mí el Adonis sexy gruñón bomberman. 

Pero ahora... le veo como Rafa. 

Mi buen amigo Rafa. 

Que está muy bueno, me cae muy bien, hacemos muchos planes juntos y me cocina. 

Pero por favor... CÓMO NO VOY A ENAMORARME DE ÉL. 

arrrrgggg....

Me encuentro a uno de mis gatitos junto a mí. 

Lo acaricio. 

¿y el otro? 

¿se lo habrá comido el perro? 

Es una posibilidad.

Me levanto con mi gatito en brazos en busca del otro. 

Paseo sigilosamente por el pasillo de la segunda planta. 

- ¿dama? - la llamo a susurros. 

No aparece. 

Si se la ha comido el perro juro que monto un pollo. 

Sigo caminando cuando de pronto se oye. 

- ¿Amaia? 

- ¡UAAAAAHHH!

Salto del susto y mi gato en brazos casi acaba en el techo.

Risas a carcajadas se oyen. 

Asomo la cabeza por una puerta. 

Es el cuarto de Rafa. 

Mierda. 

No necesitaba ver esta visión de él sin camiseta entre sus sábanas blancas dándole los rayos de la mañana como si fuera un puto ángel caído del cielo. 

Y lo peor, con mi puto gato entre sus fuertes brazos y Rudolph en sus piernas dormidito. 

Vaya postal. 

Se me retuerce el corazón. 

- hmmmm... - no sé qué decir. 

Él sonríe divertido. 

- joder Amaia, has despertado al pueblo entero con tu grito - dice riendo. 

- lo siento... es que me has sorprendido... estaba buscando a Caballero 

El cabrón estaba ahí, tranquilito, disfrutando de sus fuertes brazos. 

No es tonto el gato....

Rafa mira al gato. 

- se le ve cómodo 

Yo sí que estoy cómoda viéndote sin camiseta. 

Aprieto los labios. 

La profesora nueva se enamora del directorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora