Hasta el atardecer Akaza x Rengoku

Reunión

La reunión había terminado después de una hora, los cuatro fueron expulsados de la fortaleza en la casa de Akaza.

Prepárense, probablemente venga el estúpido de Douma.- Advirtió Akaza, tenía razón, sentían como se acercaba rápidamente.
Tenía ganas de pelear.

Akaza-dono, nunca imagine que serías capaz de transformalos, te creía más cobarde.- Atacó con sus garras y abanico al más bajo.- Quería irse encontra de Kyojuro, quien ya estaba preparado para cualquier cosa, llevaba su espada en su cintura.
Ahora qué era un demonio si qué se volvió más fuerte, tan inhumano.

Maldito omega, te dije que te comportarás y aceptaras la segunda opción.- Volvió a lanzar ataques.- Ahora mírate, Mira a tu familia. Nunca podrán volver a ser humanos. Shinjuro cubría a Senjuro para que no le tocara ningún ataque.

Douma ya déjalo, nunca hubiera sido tuyo. Deja de joder.- Era tan molesto tener que aguantarlo.

Dejaré de molestar con una condición...- Qué curioso, normalmente no se rendía tan fácil.- Quiero volver a ver a esa pequeña Pilar, la de esa noche.

¿Qué quieres con ella? No te dejaremos estar a solas, sabemos tu gusto de devorar solo mujeres y niños.- Habló Kyojuro, sería estúpido dejarlo a solas con ella, que aunque era un Pilar seguía siendo la más débil físicamente. Ella se ganó su lugar por su inteligencia y por el retiro de su hermana mayor, que fue herida en batalla.

Bueno, es algo que quiero comprobar.- entrecerro los ojos, recordando como había cambiado algo esa noche.- Parece ser que esa niña es mi pareja destinada.

Todos abrieron los ojos como platos ¿Ese idiota relacionarse con omegas? ¿Y si solo quería matarla para deshacerse de ella? No lo iban a dejar solo, definitivamente no.

Lo hablaremos con ella, si dice que si entonces podrás verla, si se niega seguiremos peleando hasta que te canses. - Habló el Pilar de la llama.

Muy bien, muy bien. Entonces me paso a retirar.-Se fuel más rápido que pudo.

¿Y ahora que hacemos? Shinubo va a matarnos.- Ahora estaban preocupados, ella daba miedo con esa sonrisa falsa y la eficacia de sus venenos.

Bueno... Si ella sintió algo esa noche entonces puede que si sea cierto lo que dice el demonio.- Dijo Akaza, para ellos era más fácil saberlo e identificar a sus parejas, a los humanos a veces se les dificultaba solo porque no llegan a aceptar varias cosas.

Se dirigieron a la finca de los Rengoku, era el único lugar donde podían acercarse. Tenían que pedir permisos especiales para dejar entrar a demonios. Ahí ya estaba Tamayo qué los ayudaría a quitarse el control de Muzan.
Fue algo difícil y hasta doloroso, pareciera que fueran a explotar. Pero los tres lograron hacerlo.

Ahora estaba Akaza, el sería el último que intentarlo. No perdería su fuerza ganada pero ya no podría recibir más sangre de Muzan. Tenía que encontrar otra manera de potenciarse.
Para es fue mucho más complicado, tantos años recibiendo ese liquido pasaron facturas. Varias partes de su cuerpo explotaban regenerandose rápidamente. Logró hacerlo, por fin se sentía libre sin ser observado cuidando qué hablaba. Tenían que ocultarse, el único lugar al que podrían recurrir sería estar en la finca de la mariposa.
Quedaba perfecto igual para lo que tenían que hablar.

Abandonaron esa casa por ahora, ya no era un lugar seguro. Tamayo ayudaba a mantener igual las fincas ocultas para que no pudieran entrar libremente otros demonios.

Shinobu, espero nos puedas recibir.- Ella se quedó de piedra, todavía no habían visto las nuevas apariencias de los Rengoku. Por poco y casi los atacaba.

Rengoku-san, te pido que para visitar a los demás pilares, les avisas con tiempo.- Se le notaba enojada.- Si hubiese sido Sanemi o Uzui hubieran sido más rápidos para atacar.

Se le olvidó que no les dijo sobre ya habían sido convertidos, o sea, si lo hablaron en la reunión pero no les dijo que lo harían esa misma noche. Ya habían pasado al menos 5 días después de hacerlo y con todo lo que pasó con los demonios se le fue por completo.

Nuestra culpa, lo siento.- Se disculpo Senjuro.

Ya qué estamos aquí tenemos que hablar contigo.- Esta vez habló Akaza, algo que sorprendió a todos pues con los demás humanos, qué no fueran Kyojuro, era de muy pocas palabras. Solo hablaba cuando era necesario.- Es sobre la segunda luna, me imagino que ya sabes a que me refiero.
Shinobu apretó los dientes y puños, no esperaba que la descubrieran tan rápido.

Como ya lo saben no tengo que ocultar nada.- comenzó a hablar.- Ese demonio es mi pareja. Esa noche qué nos encontramos nuestros ojos se vieron y nos dimos cuenta en ese instante. Noté un cambio en sus movimientos y fueron más torpes qué antes que llegáramos.

Entonces puedes saber en que situación estás.- Siguió el pelirosa.- Quiere encontrarse contigo. No dejaremos qué vayas sola. Aunque no te podrá lastimar, sigue siendo un Alfa y sus instintos lo van a detener.

Entiendo, entonces podremos verlo cara a cara. Podemos hacerlo dentro de dos días.- Estaba segura de lo que hacía, no parecía humana, no cambiaba tanto sus expresiones y sus instintos lo le ganaban. Podría ser que ella tomara otra ruta, no como la de ellos.

Entonces le enviaremos una nota, con el gato de Tamayo.- Ya habían hablado de eso tenían que ser más discretos porque Muzan puede ver a través de Douma. Quizá vuelvan a ocupar el truco de las ilusiones, no pareció darse cuenta sino ya los habría matado.
Las instrucciones qué le dieron fue qué se vieran en la casa de Akaza y que no llamara tanto la atención, no había perdido su fuerza así que seguía siendo su territorio.
Solo tenían que esperar hasta ese día.

Necesito pensar que haré con estos dos, si juntarlos en una relación bien tóxica o dejarlos morir alv