Amoeba. | luckity

En aprietos. 🔞

tw: Masturbación.

Finalmente era el día. Al menos para el castaño, finalmente había logrado deshacerse de esa paranoia suya, que aunque estuviera presente en la habitación, no era nada comparado a la falta que le hacía en su vida la presencía de ese ángel. Su paciente favorito. Sin embargo, cada acción tiene consecuencias, por eso se propuso ser mucho, muchísimo más cuidadoso acerca de su relación con el más bajo. Su.. nuevo método era algo sucio pero.. De verdad, ¿a quien le importa la legalidad del asunto? Al menos eso era lo que pasaba por la mente del doctor.

Y por suerte, ya tenía un nuevo complíce en su plan.

Uno que en realidad no estaba muy seguro de lo que hacía.

─ ¿Es necesario que yo tenga que hacer esto? Ni siquiera es parte de mi trabajo, con todo respeto, Dr. Luzio.

Susurró el alien detrás del mostrador de la clínica, observando átonito a los comentarios de su adverso. Si bien ambos estaban poniendo en riesgo a la propia empresa, Luzu tenía su manera de engatusar las cosas. Y Frank no era la excepción.

─ ¡Claro! Solo no es parte de tu trabajo, pero sí de mi protocolo.. Verás, hay muchos de mis pacientes que me requisitaron mover sus turnos en estos días. Te ahorrarás muchísimo tiempo más si simplemente no registras esos cambios.. Vamos.. ¿Cuando te debo?

Una sonrisita maquiavelíca se dibujo en el rostro del mayor. Un golpe a la realidad para la minoría, es saber que en su trabajo, casi todo esta manejado por el dinero. Nah, no solo en su trabajo, sino en todo el mundo.

Y sacaría provecho de esa ventaja.

─ . . . Te juro que no sé como termino haciendo estas cosas.

Y Luzu pensó que no había necesidad de responder una pregunta tan retoríca y menos cuando su interés por hablar con el chico del mostrador ya se había ido, así que lo dejó solo, desapareciendo de los pasillos esta vez enorgullecido.

Mentiría si dijera que los días y la escasa rutina de cada uno de ellos se le hacía duro sin ver aquellas alas, algo que pasó como una zona de comfort para el más alto ahora se había transmutado a un sentimiento de frustración por no pasarse, al menos un par de segundos a la sala en donde se encontraba su preciado ángel.

Y eso acababa hoy.

Mientras caminaba por los pasillos con una sonrisa que inspiraba determinación, de repente paró en seco. Estaba en frente de la puerta pero aún así, su cuerpo no se inmutaba.

"¿Por qué.. estoy actuando así?"

Ese fue el pensamiento que lo hizo equilibrar sus emociones, pensaba para si mismo que simplemente tenía un favoritismo especial por Quackity pero..

¿Que tal si era más que eso? Últimamente se desvelaba con la sola idea de saber que estará haciendo el pato.

─ Quacks.. ¡Ya llegué! Siento haber desaparecido de la.. nada.

Al abrir la puerta, solo se dio cuenta de que estaba hablando con la nada misma: Quackity no se encontraba en la habitación.

─ Jaja.. ¿Te estas escondiendo de mi? Pero no es necesario sorprenderme de esa manera.

Pero lo pensó bien mientras analizaba la habitación con la mirada afilada, no puede ser, porque.. El menor apenas y podía levantarse de su cama para hacer sus necesidades y obligado. ¿Que habían pasado los días anteriores? Es decir.. No puede caminar.. ¿No?

Recobró su compostura, si bien la expresión en su rostro era seria normalmente, ahora su mirada había cambiado por completo, ignorando a los demás a su alrededor para volver hacia el mostrador, haciendole notar a Frank su presencia.