Al final de rodillas

Capítulo 14: ¿Será ella?

Me parecía muy buena idea ir a otros lugares de la ciudad, no quería seguir discutiendo con Fer de el mismo asunto así que le seguí la corriente y decidí ver otros lugares de la ciudad.
- ¡Mira Eva! ¿Que es? - preguntó señalando una tienda de ropa. En ese momento me acordé que necesitamos ropa nueva, aunque sea unas cuantas camisetas, la ropa que traímos de el orfanáto era muy poca y gastada.

- Es una tienda de ropa Fer, ¿Quieres comprar algúnas camisetas? - pregunté.

- ¡Claro! Además, la necesitamos y mucho. - dijo sonriendo.

- Bien, vamos. - exclamé y a la vez cruzando la calle para llegar a la tienda.

Cuando entramos quedamos muy sorprendidas, la tienda era muy bonita la verdad. Tenía unas paredes pintadas de unos colores muy voluminosos y fosforescentes. También habian muchos cuadros muy bonitos y pintorescos en las paredes.
La tienda tenía un buen aspecto, lo cual me gustaba mucho.

- ¡Eva! ¡Mira esta camiseta! Está muy bonita, ¿No? - preguntó Fernanda señalando una camiseta color púrpura.

- ¡Está muy bonita Fer! ¿Quieres esa? - Pregunté muy sonriente.

- ¡Si si si! - dijo muy rápidamente.

- Puedes elegir otras más si quieres también. - Exclamé señalando todas las camisetas que habian en su entorno.

- ¡Gracias Eva! - susurró con una grán sonrisa.

- No hay de que. - exclamé muy sonriente.

Luego de un tiempo, mientras Fernanda se decidia por sus camisetas yo también miraba cuales compraría. No sabia cuales, estaba muy indesisa. Empezé a mirar algúnas blusas pero ninguna me gustaba, no se porque le tomé tanto cariño a las camisetas, creo que como usabamos todo el tiempo camisetas en el orfánato pues, quizas sea esa la razón de mi afecto hacia las lindas camisetas.
Después de un buen tiempo me decidí por unas muy bonitas y coloridas, Igual Fernanda. A las dos nos gustaban los mismos tónos y estilos, en ese aspecto eramos muy parecidas. Luego, cuando ibamos a pagar las camisetas ví unos collares muy bonitos, me llamaron mucho la atención la verdad. Había una mitad de el collar que decía "Mejores" y la otra mitad decia "Amigas". Imaginé que a Fernanda le encantaría un regalo como ese, se que le fascinaria. Así que no dudé más y decidi comprarlo. Era un poco extenso en el costo pero no me importó, sentia que debia comprarlo de todas formas.

- Fer, ten, es para ti. - dije extendiendole la mano y poniendo el collar en ella.

- ¡Awww Eva! ¡Que detalle! No debiste molestarte. - dijo mirando el collar muy feliz.

- No es nada, además lo hice porque te quiero como la hermana que perdí, no sabes lo mucho que significas para mi Fernanda. - dije y a la vez ayudandola a poner su collar.

-Oh Eva, no sabes cuanto significas para mi tampoco, eres mi hermana de diferente sangre, mi única familia terrenal, No sé que haria sin ti. - dijo y a la véz ayudandome a poner mi collar.

Luego de eso, seguimos caminando por la ciudad y vimos un puesto de helados muy cerca, por lo que me acerqué para comprar uno.

-¿Cuanto cuestan? - pregunté acercandome al señor que los vendia.

- Dos dolares cada uno. - dijo sonriendo. La verdad , estaban a un costo muy razonable para su tamaño.

- Quiero 2 porfavor. - exclamé.

- ¿Que sabor? - dijo el señor muy amablemente.

- ¿De que sabor Fernanda? - pregunté a Fer mientras ella miraba todos los sabores que habian.