Amarte No Es Difícil (Tú y Kefla)

Cap 44: Visitando el pueblo saiyajin

Una hora había pasado y los tres saiyajines luego de haber desayunado, y vistiendo su ropa habitual salieron de la casa en la que se quedaban, emprendiendo el vuelo por el cielo, siguiendo al chico que era el único que conocía el camino hacia el pueblo.

En el camino la charla fue poca. Kefla volaba a su ritmo, todavía no parecía estar convencida de la idea de ir a esa fiesta, pero ___ estaba seguro de que ella pronto se olvidaría del tema y se les uniría a la diversión. Como si de una niña caprichosa se tratara, su aptitud enojona podía esfumarse en cualquier momento.

Mientras volaban, Kali acelero un poco, colocándose al lado del chico, el cual la miro de reojo y le sonrió para luego volver a poner su vista en el camino. Él pudo notar que ella se notaba muy feliz, como una niña ilusionada por llegar a un lugar fantástico y divertido.

___: Oye Kali, gracias por lo de hace un rato, pudiste convencer a Kefla de venir, de no ser por ti la verdad no sabría que hacer, te debo una.

Kali: Ah no es nada, yo solo hice lo que vi correcto, realmente necesitamos descansar de vez en cuando ¿no?

___: Si, tienes razón. A todo esto, parecías muy feliz de saber que vendríamos a una fiesta ¿tan emocionada estas por divertirte?

Kali: E-Eh y-yo bueno... Si, podría decirse que si, la verdad es que... Me siento muy feliz por ir a una fiesta juntos.

___: ¿Oh?

Kali: ¡Q-Quiero decir, juntos en grupo, como amigos!

___: Espera, no me digas que tu nunca...

Kali: Nunca tuve la oportunidad de salir a fiestas con amigos, o siquiera celebrarlas con mi familia, yo uh...

___: Ya veo, Kali, comprendo lo que dices, pero ahora es diferente, iras a una fiesta de verdad, con amigos de verdad, harás tu sueño realidad.

Kali: ___...

La chica miro al chico fijamente mientras sus ojos se humedecían por un profundo sentimiento que hundió su espíritu en una tristeza que era liberada luego de haber permanecido oprimida por bastante tiempo.

Kali se frotó los ojos con sus manos, limpiando las lágrimas que habían salido, ella estaba feliz de que alguien la pudiera entender y que la considerara una amiga de verdad, realmente se sentía bien por contar con alguien como él.

Kali: Gracias por entenderme —le dijo al saiyajin con una feliz sonrisa.

___: ¡Si!

Ambos siguieron volando a una velocidad media. Kefla no se había movido de su lugar, pero se notaba un poco más calmada sin rabia en su rostro. Tal como ___ lo había supuesto, el enojo se le había pasado.

Con el pasar del tiempo el trío de saiyajines habían dejado atrás el territorio que ocupaban como área de asentamiento, ahora se encontraban volando sobre una vasta tierra de praderas y peñascos donde animales herbívoros pastaban. Algunos de ellos se parecían a los dragones de carga que usaban en el castillo como medio de transporte, estos estaban libres en el campo, conviviendo en manadas y bastante felices de su vida como bestias salvajes.

Pronto dejaron el territorio de pradera, y siguiendo al chico los tres saiyajines desviaron el vuelo que mantenían en linea recta, siguiendo ahora un río que se extendía por el campo, era demasiado largo y aun si iban volando parecía que no acababa, pero según el chico solo les iba a tomar diez minutos en salir de ahí si aumentaban el ritmo.

Punto de vista: Kali.

Han pasado algunos minutos desde que dejamos la base y luego de pasar por varios lugares de campo abierto nos encontramos volando sobre un río cuesta abajo, por lo que ___ dijo tenemos que seguirlo para poder llegar al poblado donde se llevara a cabo la fiesta a la que fue invitado.