Eddie, My Love.

O

{//_Universo Alternativo_//}

🔞🇷🇺El contenido que se mostrará a continuación no es apto para todo público se pide la discreción del lector/a🇬🇧🔞

Todos en aquella sala hablaban sobre el respeto entre países sin importar qué, aburriendo a absolutamente todos los presentes. Siempre decían lo mismo; respeten las creencias y religiones diferentes a las suyas, respeten a sus vecinos aunque hayan tenido conflictos pasados, respeten a los extranjeros, respeten, respeten, respeten.

Presenciaron un milagro cuando tocó la campana de almuerzo, todos corrieron como si fuese un terremoto. Los protagonistas quedaron solos en aquella sala de juntas, mirándose cómplices ante lo que iban a hacer.

...

  Era una pequeña escapada del trabajo, una escapada que se daban cuando se estresaban, entregando sus cuerpos para la satisfacción del otro y propia.
Ni siquiera eran pareja o tenían alguna relación de por medio, era sexo y sexo.

Regresando a eso, estaban en la habitación de Rusia, usando la ducha para hacer creer que el dueño de la habitación estaba bañándose, pero en realidad estaba mojándose con otra cosa.

 No sería la primera vez que hacen eso, pues el trabajo últimamente los tenía estresados y un comentario llegó a sus oídos; Alemania utilizaba las relaciones sexuales con su pareja para aliviar el estrés luego de un día duro, no tan duro como su pene al llegar a casa.

 Los ruidos llegaban hasta los otros dormitorios, no podían parar hasta llegar a su límite.

Un vibrador cumplía su función dentro del británico mientras este lamía los testículos del ruso y atendiendo el pene con sus manos, mirando al comunista de vez en cuando, disfrutando de cómo le observaba.

De un momento a otro, Reino Unido dejó de darle placer a su contrario por una repentina debilidad en sus piernas y una presión en su vientre. Al ver aquello, Rusia aumentó la velocidad del juguete, sosteniendo a su rey para que no se cayera sobre la cama, susurrando cosas lindas a su oído, diciéndole lo bello y perfecto que era, además de mimarlo y toquetearle las piernas.

Cuando sintió que la sensación aumentaba su nivel, comenzó a chupar nuevamente el pene del hijo de la URSS, pero esta vez, con más fuerza, haciendo que el ruso gimiera melodiosamente. Ambos estaban a punto de correrse.

Primero Rusia se corrió dentro de la boca de su ""novio"", besándolo rápidamente mientras agarraba el juguete y así controlar la profundidad que este alcanzaba, estando atento a las expresiones tan lindas que hacía el pequeño inglés.

Cuando por fin llegó a su orgasmo, quitó el vibrador con cuidado, abrazándolo con ternura ante la expresión que tenía en su rostro, pues le endulzaba el corazón la combinación entre su carita, respiración y los jadeos incoherentes.

A trabajar se ha dicho.