Eddie, My Love.

T

Eran mimitos tras mimitos, apapachando a su hijo como si no hubiese un mañana, apenas tenía cinco meses y se había ganado el corazón de los dos países que lo criaban con amor.

ONU había dicho que, si su piel comenzaba a cambiar de color, sería completamente normal, siempre en cuando fuese los colores de sus padres. Si era algún otro color, era posible que fuese una enfermedad causada por una falla en la incubadora. Hasta ahora, no había señal de cambios coloridos.

Era un niño bastante parecido a Rusia, pues tenía muchos rasgos de este cuando era pequeño y su bandera, pero no tenía nada parecido a UK, lo que lo ponía triste.

—"Mhmhh~ mhjh~"— tarareaba.

El de monarquía miró celoso la unión que su hijo tenía con el ruso. Él también quería jugar con el bebé, pero no podía.

Russien no paraba de reír con su padre, pero no iba con su "madre" si no fuese por comida, aunque eso no significa que no lo quisiese, simplemente está acostumbrado a jugar más con su papá. El inglés no quería aceptar eso.

Rusia le acercó al bebé a su novio, quién lo miró por un momento y chasqueó la lengua para irse enojado afuera, dejando al ruso confundido.

Dejó al pequeño en su cuna para seguir al mayor, abrazándolo por detrás cuando lo encontró en la acera, mirando el cómo cruzaban los vehículos a gran velocidad. El hijo de Inglaterra intentó apartarlo.

—"King…" [/Rey…/]—

No contestó.

El británico quería que lo dejara solo un momento, pero no iba a ser así.

—"Russien will be sad if you don't play with us…" [/Russien estará triste si no juegas con nosotros…/]— dijo, depositando un beso en el cuello de su novio.

—"I don't wanna play" [/No quiero jugar/]— Resopló.

—"Why…~?" ¿~Por qué…~?—

—"He does not love me…" [/Él no me quiere/]—

—"Honey… [/Cariño…/]"— Abrazó más fuerte al pequeño.

Rusia le agarró las mejillas, dando un beso dulce, pero no llegó a endulzar la expresión desanimada que su pareja tenía, mirándolo fijamente con una vibra de tristeza.

—"Leave me alone…" [/Déjame solo…/]—

El llanto de su niño se escuchó, por lo cual el ruso dió un último beso a su amor y se adentró a la casa.

Le estresaba el llanto del bebé, no sé había callado y el sonido parecía incrementar su volumen, taladrándole la cabeza hasta el punto de que se tapó los oídos con sus palmas.

El comunista salió con el menor en brazos, acercándose rápidamente al inglés. Al principio, intentó alejarse, pero luego el niño se le fue entregado y se acurrucó en su pecho, calmándose al sentir la calidez de su mamá, abrazándose para no ser apartado. Realmente le había sorprendido aquello.

—"You see it? He adores you…" [¿Lo ves? Él te adora…—

Rusia cubrió con su brazo a sus dos razones de vivir, quedando los tres pegaditos mientras el bebito acariciaba a su mami, demostrándole su amor sin darse cuenta.