Capítulo 41: Plan a la perfección

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Ya estábamos en el colegio cuando Kath entro a mitad de mi clase de biología para empezar nuestro plan, no era uno de esos planes súper maléficos, no; solo era una probadita para que Dayana se metiera en sus propios asuntos y no se metiera con mi novio.

-Ya está la harina, los huevos, la miel y en la salida dejaremos el shampo-me aviso Kath con una amplia sonrisa

-Está bien, ahora ya viene para acá así que pásame la harina por favor-le pedí a Kath y rápidamente me paso un bote con algo de harina y huevo

-Ya mero-susurro Kath y yo Salí al pasillo donde ella venia, cuando la vi me "caí" y le eche encima la harina con el huevo

-¡Maldita!-chillo Dayana viéndose la ropa y yo me hice la victima

-Hay perdóname muchísimo no era mi intención, en serio perdón-le dije y vi que se aproximaban más personas así que me fui diciéndole en susurro perdón

-Ve esto-me dijo Kath encellándome el video y reí a carcajadas

"JAJAJAJAJA"-se empezó a escuchar los murmullos de la gente que venía al mirar a Dayana, cuando voltee a verla tenía la cara roja de rabia y les gritaba a la gente cosas como "Tontos" "¿Qué me ven?" "Se te perdió algo, ¿o porque me miras?" "Malditos sean"

Yo ya no podía respirar de la risa, pero eso no era todo, faltaban las bromas de todo el día

-Vayamos por lo que nos falta-le dije a Kath y me metí a la Jeep de Erick, se la había pedido prestada diciéndole que necesitaba ir por unas compras para mi mama, y el rápidamente me la había prestado. Sabía que Kath y yo nos estábamos saltando clases pero no nos importaba, lo primordial era poner en su lugar a Dayana

-Sigue la broma de la araña en su bolsa, ¿no?-le pregunte a Kath con una sonrisa maliciosa

-SIP, ya casi llegamos.

*************

-Shhhhh-me silencio Kath la risita tonta que tenía al mirar por la puerta de la clase de Dayana, le había pedido a David que él se encargara de meter la araña en su bolsa de mano, según Mauricio eran su peor pesadilla, así que compramos una de juguete y él se la metería a la bolsa. Grabaríamos su reacción.

-Ya llámala-le dije a Kath nerviosa, el plan era llamarla que metiera la mano en la bolsa y luego que viera la araña, solo eso

Kath llamo a Dayana desde el teléfono de Alex, él había conseguido el número, no sé cómo, pero lo tenía así que llamamos

"Worth it" empezó a sonar y Dayana rápidamente agarro su chica bolsa de mano, metió la mano y a expresión que vimos siempre quedaría grabada en mi memoria.

Dayana abrió los ojos como platos, la mandíbula casi le llegaba al suelo, empezó a templar y cuando vio bien a la araña de goma grito fuertemente, tan fuerte que de seguro todos la habían escuchado; lanzo la bolsa al piso y se subió al banco

-UNA ARAÑA, ARAÑA-empezó a chillar con la voz más chillona que nunca

-Señorita bájese de ahí-le aviso el profesor notando donde estaba Dayana

-Pero-pero, ¡UNA ARAÑA PROFESOR! ARAÑAAA-chillo medio trabándose con el templo en la voz

-No podía dejar de reí hasta que estalle en carcajadas al ver que David si había terminado el favor. Coloco otra araña idéntica en su brazo cuando estaba distraída y cuando ella la vio grito más fuerte, se lanzó de la silla y empezó a brincar como loca

-NO, ME COMERA, AYUDA, DIOSS-chillo más fuerte y todo el salón se empezó a reír a carcajadas incluyéndome

-Dios prometo portarme bien, ya no hace nada malo pero quítame a esta cosa fea de aquí-empezó a decir y le di la señal a David para que le lanzara una araña  en los brazos lo cual hizo y ganamos que Dayana se cayera de la silla y se empezara a retorcerse en el suelo

-Ayudaaaaaa-chillo más fuerte y dejando de reír el profesor se acercó a ella y le quito la araña, pero ella seguía retorciéndose en el piso como la cola de la lagartija cuando se la cortan

-¿Quién hizo esa mala broma?-gruño el profesor quitando todo rastro de risa de su voz

En ese momento Kath y yo salimos corriendo de nuevo a la jeep y sin pensarlo dos veces  y arranque la jeep a toda velocidad

-Estamos mal-me dijo Kath empezando a reír fuertemente

-Lose, pero así nos amamos-le conteste sin dejar de mirar hacia adelante pero también riendo fuertemente

-¿Viste cómo se retorcía en el suelo?-me dijo riendo más fuerte

-Parecía lagartija-estuve de acuerdo yo riendo junto con ella

-Lose

Así seguimos todo el camino hacia mi casa recordando como Dayana se retorcía y también viendo cómo íbamos a preparar la otra broma, Dayana nunca se debió de haber metido con lo que es mío.

Mi único problema... eres tú (Editándose)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora