Capítulo 9

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Dick era plenamente consciente de las cámaras y micrófonos ocultos dentro de su cuarto (supuso que no pretendían que lo supiera). El chico también advirtió que la puerta no estaba cerrada como debería. Dick dedujo que se debía a una prueba de confianza, ellos sabían que él sabía que la puerta estaba abierta.

Así que decidió simplemente sentarse en el borde de la cama, sus manos agarrando el colchón de la misma y sin despegar los ojos del suelo. Tenía que parecer que estaba arrepentido y triste de sus acciones pasadas (pero, cabe recalcar que no lo estaba). Las lágrimas empezaron a rodar silenciosamente por sus mejillas y sus dedos apretaron el colchón al que se agarraban.

"Sigo pensando que soy un actor increíble" pensó alegremente el aprendiz de Deathstroke. Su expresión corporal y facial no delataban sus verdaderos sentimientos. "Manhunter puede estar viendo si realmente me siento como muestro" pensó algo alarmado, pese a que su mente estaba "blindada" ante los marcianos, los sentimientos simplemente emanaban de una persona y eso no se podía evitar. Así que fue a los pensamientos más tristes que pudo encontrar. "Eso debería ser suficiente" pensó con suficiencia.

Dick se tumbó en la cama de lado, sus piernas encogidas y los brazos permaneciendo cerca de su pecho, las lágrimas ahora bajaban por los laterales de su cara y algunas rodaban por la nariz para acabar mojando las finas y suaves sábanas blancas.

Sus respiraciones se fueron nivelando y sus ojos se cerraron, estaba dormido. O eso era lo que aparentaba desde fuera. Lo que más le urgía en ese momento era salir de ese lugar plagado de escoria y volver al lado de su padre. Si cualquiera miraba vería a un pobre joven destrozado que se ha dormido mientras lloraba pero lo que ocurría era completamente diferente. Su mente trabajaba a 1000 por hora pero, sin darse cuenta y debido al cansancio provocado por la misión, acabó por dormirse de verdad.

Dick despertó algo desorientado. Miró a su alrededor, sin entender del todo dónde se encontraba. La realidad le golpeó: la misión, Jason, Monte Justicia, Dinah... "Oh mierda..." pensó el joven poniendo una mano sobre su frente y frotando su cabeza. Se levantó y se dirigió al baño para limpiarse la cara y despejarse un poco.

-¿Dick?- la voz de Dinah sonó al otro lado de la puerta junto con un par de golpecitos en la puerta, pidiendo permiso para pasar.

-A... Adelante- dijo fingiendo sorpresa, la había escuchado acercarse. La puerta se abrió con un pequeño silbido y apareció la rubia en el marco de la misma- Acompáñame, por favor- el chico de 18 años asintió y siguió a la mujer hacia la sala donde hacía terapia- Hoy hablarás con Wally.

La verdad es que Dick prefería hacer cualquier cosa menos hablar con Wally o Bruce. No quería con el pelirrojo debido a que no le gustaba mentirle a la cara de esa forma y seguía sintiéndose traicionado por el que fue su padre adoptivo por, no solo dejar que Jason muriera, si no por revivir a un loco como el Joker. Pero nada delataba esos sentimientos y simplemente asintió con serenidad.

-¡Dick!- exclamó el velocista entrando a toda velocidad en la estancia y abrazando a su mejor amigo- ¡Cómo me alegro de que estés vivo!- Dick se tensó ante el contacto y le dio dos palmadas incómodas en el hombro al pelirrojo, que se separó algo desconcertado.

-Dis... Disculpa, no esperaba un contacto tan repentino, no estoy muy acostumbrado- afirmó rascándose la nuca y apartando la mirada. Lo cierto es que eso no era mentira, realmente no estaba acostumbrado a eso. Él no era demasiado dado a las muestras de afecto desde que se afilió con Slade. No le parecía mal que el tuerto no mostrara amor físico, era consciente de que el hombre tenía su propia manera de hacerlo.

-No... Tranquilo- dijo algo desilusionado, pero rápidamente lo enmascaró y volvió a exhibir su brillante sonrisa- ¡Tenemos mucho de qué hablar! Cuando nos enteramos de que habías regresado, Artemis y yo volvim...

-Espera- interrumpió el joven de 18 años levantando una mano- ¿Artemis y tú? ¿Por fin es oficial?- inquirió.

-¡Sí!- exclamó emocionado- Espera- ¿Tú también lo sabías?

-Por Dios, Wally, lo vuestro se veía a quilómetros- respondió el de cabello azabache con sorna.

 Wally y Dick charlaron durante mucho rato sobre la vida del pelirrojo (dado que se suponía que el pelinegro estaba traumatizado con sus tiempos con Slade) y de los viejos tiempos juntos, tampoco abordaron el tema de los Titans. Por primera vez desde que estaban allí, se olvidó de su situación momentáneamente. No lo admitiría pero había echado algo en falta a Wally. No le malinterpretéis, Dick ama su vida delictiva pero, si hay algo que echaba en falta de su anterior vida, era su amistad con el pelirrojo.

-Lamento interrumpir, pero debemos pasar a la siguiente persona que quiere hablar con Dick- dijo la psicóloga y heroína rubia. La cara de ambos cayó y la de Dick más aún cuando vio a Bruce entrar en la sala una vez Wally y Dinah salieron de la misma.

-Bruce- saludó el chico con un asentimiento. Esto iba a ser incómodo, al menos había estado bien hablar con su mejor amigo un rato, una pena que lo fuera a traicionar.

-Sé que esto es duro, que te revivan, que te lleve un mercenario y se aproveche de tu vulnerabilidad. Y en parte... Es culpa mía...- dijo bajando la mirada y dejando colgar las manos delante suyo, en cuanto entró se había bajado la capucha.

"En parte, dice" pensó Dick. Todo había sido culpa suya, pero gracias a su ineptitud, había podido encontrar una figura paterna mejor.

-Si te hubiera cuidado mejor, mantenerte conmigo... Nada de esto habría ocurrido...- "Parece tan arrepentido..." Pensó Dick pero sacudió la cabeza, borrando ese pensamiento de inmediato. "Por su culpa murió Jason y el Joker sigue con vida" razonó

-Ninguno de los dos sabíamos que esto podía ocurrir, no es tu culpa- Respondió Reneade. Eso sí que era una mentira como una montaña. Realmente Bruce era el culpable de todo pero él no necesitaba saber que eso era lo que había pensado en realidad. El multimillonario le explicó sobre el nuevo Robin y cómo Jason se había adaptado y cómo él haría lo mismo... Dick fingió interés y ocultó su ira ante el hecho de que Bruce había sustituido muy rápido al segundo Robin.

Afortunadamente, la charla con Bruce duró poco y pudo retirarse a su cuarto a descansar y comer un rato. Recibió un par de visitas que no tuvieron mucha trascendencia. Los días pasaron y la rutina no varió. Dick estaba de nuevo en terapia, ya llevaba un mes aproximadamente en la montaña y según los héroes "estaba mejorando". En esta ocasión, se encontraba hablando con Dinah.

Repentinamente, luces rojas empezaron a iluminar la sala mientras el ordenador central alertaba de la presencia de intrusos. Dinah y Dick se pusieron en pie, la mujer mirando a la puerta por donde se escuchaban pasos apresurados y él adoptando instintivamente una posición defensiva.

-Nos atacan- gritó Wally, vestido de Kid Flash, sobresaltado. Dick tuvo que contener un resoplido, el pelirrojo tendía a ser Mr. Obvio cuando había una emergencia.

-¿Quién?- preguntó calmadamente Dinah, si le gritaba, no ayudaría al ya histérico velocista.

-¡Slade!

Not a Robin anymore (YJ & TT)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora