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Ya habían pasado dos meses desde que Jacob Black decidió marcharse a causa de la boda de Bella Swan y la sanguijuela Cullen. Nuestro hermano había decidido abandonar a su hogar, a su manada pero sobre todo, a su impronta Jasmine.
Jasmine durante el primer mes no estaba comiendo, era un ente ambulante; Nos preocupaba que su cuerpo no pudiera aguantar tanto el distanciamiento de su lobo.
Sin embargo, la pelirroja Fuller había comenzado a salir con su amigo italiano, Adrián. Era un buen chico, la trataba bien y la respetaba. Algo que Jacob Black, apodado el "imbécil más grande del planeta" , nunca pudo hacer y lo más importante, nunca le nació hacer.
—Me alegra ver un poco mejor a Jas—comenté viendo a Jasmine besando y sonriendo a su nuevo novio, quien al separarse la llenó de besos en su rostro antes de que Brady Fuller los separara.
—Se lo merece. Jacob es mi hermano y lo quiero, pero lastimó mucho a Jasmine. Eso no se puede perdonar.
—Exacto. Los hombres son unos idiotas.
En cuánto termine de decir eso, el chico me miró con una expresión de ofensa.
—¡Hey!
Me reí ante su expresión y tome su mano.
—¿Por qué mejor no vamos a otro lugar Seth Clearwater?—articule los labios sin pronunciar alguna palabra, mi hermano Paul estaba cerca
—¿Estás segura?—Seth me imitó captando mis indirectas, yo asentí antes de que a la par nos levantaramos de la arena.
La manada estaba pasando el rato en la playa de La Push, mañana era la boda de Bella Swan y estaríamos vigilando el territorio a causa que tendrían algunos invitados sanguijuelas.
—Tengo que hacer algunas cosas—avisé tratando de inventar alguna excusa
—Si yo también.
—¿Así? ¿Qué cosa?—preguntó Paul sospechando, nosotros nos miramos sin saber que decir.
—Cosas.
—¿Qué cosas?
—Tarea
—¿Sobre?
—tarea Paul, ¿recuerdas que vamos al instituto y tenemos clases?
—Si pero..—Paul iba a decir algo pero Cassi captó mi ayuda y lo beso, distrayendo al lobo
—vamos Paul, hace una hora que no me besas, ¿acaso ya no te gusto?—preguntó la rubia haciendo un puchero y Paul no espero más antes de besarla apasionadamente, Cassi me hizo una señal con la mano de que era el momento de escapar.