Capitulo 8

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Johan Hoffman.

10 de abril

Me quejo débilmente cuando soy lanzado al suelo por uno de mis compañeros. Varios niños se ríen de mi, me levanto para luego lanzarme contra Arno, pero no duro mucho golpeándolo cuando varios me empujan y me empiezan a patear el estómago, escucho a mis hermanos, hacen que dejen de golpearme, todos se van dejándome con mis hermanos.

-Te he dicho que no te separes de nosotros a la hora de receso.

-Solo quería ir al baño y ellos estaban ahí, ni siquiera los voltee a ver cuando me empujaron.

Evan a tratado de protegernos a todos, pero no puede dividirse en todos nosotros, todos hemos recibido varios malos trato de nuestros compañeros, nos consideran los hermanos raros solo por no querer jugar o hacer amigos, no hemos querido decirle nada a papá porque ya suficientes problemas le damos.

"Solo problemas le darán a su padre, si se andan quejando siempre hasta el se va aburrir de ustedes como yo lo hice"

Aprieto mis labios ante el recuerdo de las palabras de mi madre. Me duele el estómago cuando intento levantarme, se que tendré varios moretones, solo espero no tener uno que mi papá logre ver. Llegamos a casa, mis hermanos y yo nos sorprendemos cuando encontramos a nuestra pediatra hablando con nuestros tíos y abuelos.

-¿Que hace ella aquí?

Traté de no sonar como molesto, pero creo que ya es el tono que mis voz adquirió con los años por los tratos de mi madre, veo a la doctora que salvo a mi hermanito, Ethan la abraza y la ve como la octava maravilla del mundo, siento un pequeño nudo en la garganta cuando veo cómo ella lo abraza y lo mima, una oleada de celos se incrusta en mi, deseo que me abrace así.

Subo rápido las gradas enojado por mis locos pensamientos, una vez bañado al igual que mis hermanos bajamos  almorzar, Ethan se pone triste cuando le dicen que la doctora se fue, nos sentamos a desayunar, todos comemos entre risas por las cosas que dicen mis tías. Estamos en nuestro cuarto cuando Emma nos hace acercarnos para contarnos algo.

-Debemos hacer que Romina se vaya.

-¿Como? 

-Podemos hacerle una broma, tal vez así logremos que deje de ser nuestra pediatra y se vaya.

No me gusta esa idea, es la primera que hemos visto que no se ha fijado en nuestro padre, se fijo en nosotros, nos trata bien.

-¿Por que quieres hacer que se vaya? Nos trata bien, no nos a amenazado con decir que se convertirá en la esposa de papá y en disque nuestra madre como lo han hecho las demás.

Nuestros cuatro hermanos mayores se ven entre sí, debatiendo en si decir o no su razón. Evan es el qué decide hablar.

-Lo decidimos porque se que nos estamos encariñando de ella, yo estoy empezando a sentir su trato y cariño hacia nosotros como.....

Sus ojos se llena de lágrimas impidiendo que deje de hablar, Eda es la que termina la oración con dificultad.

-Maternal, el cómo nos trata es como siempre quisimos que lo hiciera mamá, por eso no es bueno seguirla viviendo, ella tarde o temprano se irá, nosotros dejaremos de necesitarla, y ella no tendrá motivos para vernos. Aparte, no es normal que te encariñes tan rápido de alguien, ella se tiene que ir.

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