Capitulo 33

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Romina Lennox
13 de septiembre de 2023

Voy entre los pasillos del supermercado con un carrito de compras, Ray y Raina van dentro de el mientras sus hermanos van enfrente mía viendo que pueden llevar, dos de mis guardaespaldas va tras nuestra viendo que no haya ningún peligro.

-Quiero quiero.

Volteo a ver lo que señala Raina, uvas, me río ya que le encantan, tomo tres paquetes.

-Oye mamá.

-Dime Adán

-Sabes que los cuatrillizos Hoffman cumplen años el mismo día que nosotros?

Abro mis ojos horrorizada, nunca pregunté por sus cumpleaños.

"Y así quieres ser una madre para ellos" maldita conciencia.

-Enserio cariño? No lo sabía, de hecho no se el cumpleaños de ninguno de ellos, ahora me siento mal por eso.

-Puedes darles regalos atrasados si los demás ya cumplieron años. Estuvimos hablando en el colegio de si nos dejarían hacer una fiesta de cumpleaños juntos y poder invitar a nuestros amigos.

Logramos cambiarlos de colegio y están felices, nadie los molesta, han hecho amigos.

-Claro cariño, solo hay que hablar con el papá de ellos a ver qué opina.

-Podemos ir hoy a preguntar?

Asiento ya que tengo que preguntar por el cumpleaños de cada uno, joder me siento pésimo, ojalá no hayan pasado sus cumpleaños ya. Terminamos de dejar las cosas en el carro para irlas a dejar rápido a nuestra casa y luego ir a la mansión de los Hoffman.

Los de seguridad nos dejan pasar rápidamente. Ada toca el timbre muy emocionada, nana Ericka es quien nos recibe con emoción.

-Que bueno verlos por aquí, ya me hacían falta.

-Solo fueron 4 días nana.

-Mucho para esta pobre anciana, Romina. Pasen, Konrad esta arriba con los niños.

Los niños corren hacia el segundo nivel como si fuera su casa, llegó al cuarto de juegos justo cuando Konrad abraza a mis 6 rubios con tanto cariño, los 8 pelinegros se abrazan a mi, beso las cabecitas de cada uno. Por último estoy siendo abrazada por los fuertes brazos de Konrad, inhalo su perfume mientras lo sigo abrazando.

-No sabía que vendrían, me hubieras avisado para tenerles algo para comer.

-No te preocupes por eso, venimos porque mis renacuajos me comentaron que cumplen años el mismo día que Evan, Eda, Emma y Elisa, y que quieren hacer una fiesta todos juntos y venía a preguntarte que opinabas.

-Oh si cuando fuimos de pesca me contaron eso, me sorprendió que hayan nacido el mismo día y sean cuatrillizos, Ada hasta dijo que si tuvieran el mismo color de pelo y ojos dirían que son octillizos.

Me río ante esa ocurrencia.

-Nuestros octillizos.

Su sonrisa se hace más grande por mis palabras. Voltea a ver a los niños que se pusieron a jugar.

-Entonces quieren hacer su cumpleaños juntos?

-Si papá, nos dejas?

-Claro, solo digan de que quieren hacerlo para empezar a preparar todo ya que solo faltan días.

Creo que ya lo tenían planeado cuando los 8 levantan sus brazos gritando.

-Vaqueros!!!!

-Vaqueros sera, vamos Romina, a preparar la fiesta de nuestros hijos.

Nos dirigimos a su habitación para organizar algunas cosas. Tenemos ya donde pediremos los adornos, el pastel, la comida y los disfraces para cada uno, hasta nosotros nos disfrazaremos.

-Ya está todo arreglado.

-Bien, no es el día de la fiesta y ya me estrese.

El ríe divertido para luego poner un mechón de mi cabello detrás de mi oreja.

-Quería pedirte un consejo.

-Sobre que?

-Me gusta una mujer, me trae loco pero aún tengo miedo a arriesgarme.

Siento como el mundo cae a mis pies, el hombre del que me estoy enamorando día a día le gusta otra mujer. Trato de aparentar normalidad y le doy una pequeña sonrisa.

-Enserio, eso es muy bueno Konrad, te mereces una buena mujer.

Me ve detenidamente, cómo si no quisiera perderse ninguna de mis expresiones.

-Es una buena mujer, es maravillosa, tengo miedo por mi y mis hijos, dejarla entrar a nuestras vidas.

-Si tú corazón siente que es buena, entonces déjala entrar, se feliz, te lo mereces, se lo merecen después de tanto sufrimiento.

-Lo haré, si acepta mis sentimientos te la presentaré, se que se llevarán de maravilla.

-Estaré feliz de conocer a la mujer que pueda ser el amor de tu vida.

Me da una pequeña sonrisa, esta por decir algo más cuando tres niños ingresan a la habitación. Levanto a Ethan para besar sus mejillas.

-Nana hizo pasta con camarones, vamos.

Salimos los 5 tomados de la mano, Ethan va en medio de Konrad y yo, en mi otra mano va Ray y Raina va de la otra mano de Konrad, llegando al comedor, nana y Carlo nos ven con una sonrisita.

-Hasta parecen una verdadera familia con  sus 14 hijos.

"Esa realidad está muy lejos nana"

Una tristeza me invade al pensar que alguien más se estará sentado aquí con ellos, veo a los niños que empecé a querer como mis hijos, ellos tal vez querrán a otra mujer como su mamá.

Terminamos de cenar, los niños quieren jugar más pero mañana tienen escuela así que nos vamos a casa, vamos en el carro cuando Ada me hace una pregunta que me deja paralizada por un momento.

-Mamá tú crees que el señor Konrad nos deje llamarlo papá?

-Lo...ven como un padre?

-Si, nos cuida y nos da mucho cariño. A ti no te gusta mami? El sería un buen esposo para ti.

-El quiere a otra mujer cariño, yo no se si el los deje llamarlos Papá, pueden preguntarle pero no les aseguro una respuesta positiva.

Asienten un poco desanimados.

Genial Konrad, no solo robaste mi corazón, también el de mis hijos.

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