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Tierra 306

Habían pasado unas semanas y según Wanda, Sharon se había quedado casi a diario en la recámara de Steve

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Habían pasado unas semanas y según Wanda, Sharon se había quedado casi a diario en la recámara de Steve.

Me decía que si yo quería podía hacer que Steve la dejara.

[ Pero que parte de que Steve no fue mío no entendieron - comentó mi conciencia ]

Solo era una relación de sexo y la ver que conmigo no podía, busco con quién estar.

Palabras exactas de él.

—Espero que me entiendas —termino de decir.

—Claro —fingir estar perfecta.

Una semana después nuevamente estaba sentada en la silla delante del escritorio de Ross.

—La Doctora Quinn llamo y dijo que estás tomando un medicamento más fuerte pero sobre todo que necesitas descanso.

—Estoy bien.

—La doctora recomendó que estés alejada del complejo. Y por ella te necesito en Ciudad Starling.

—¿Para que?

—Al parecer alguien hizo explotar el búnker del equipo Flecha. Y lo están reparando —contesto—. Y con el conocimiento que tienes en tecnología los puedes ayudar.

—Para eso tienen a Smoak.

—Ayuda extra no les vendrá nada mal—dijo—, además no te estoy preguntando, es una orden.

A regañadientes acepte, pero la verdad no me incomodaba del todo salir de Nueva York.
Necesito alejarme un poco y no pensar tanto en Steve y en Sharon.

¿Porque conmigo nunca me mostró un poco de afecto como lo hace con ella?
Solía pregúntame antes de ir a dormir.

Las pesadillas con Rumblow volvían y me impedían seguir dormida. Es por ello que la doctora me dió otro medicamento.

Aunque esté hacia que durante el día estuviera como desconectada de la realidad en la que estaba.

Tome una maleta con las cosas más esenciales y subí a mi auto para dirigirme a Ciudad Starling.

Eran varias horas de camino así que debía entretenerme con algo. Puse música la cual no ayudo mucho pues habían estrofas que me recordaba a cierto rubio.
Y me daba por apretar el volante hasta que miraba mis nudillos blancos.

—Debes controlar tus impulsos. —sugería la doctora Quinn—. Cuenta hasta 100 o hasta el número que quieras.

Una vez que llegue a Ciudad Starling me di cuenta que no es tan fea como Stark suele referirse a los lugares que él no visitaría.

Estaba afuera de la ubicación del búnker y tomando aire en mis pulmones entre al lugar.

—Si que lo destruyeron —me burle bajando los escalones.

POR ELLA ®Donde viven las historias. Descúbrelo ahora