CAPITULO 06

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Eva

Dos días después...

Hoy era el día en el cual se iba a realizar el operativo, estaba algo nerviosa por tener que volver a el papel de Brenda Morgan y me resultaba difícil volverlo hacer, «No tengo idea porque». Releí todo lo necesario para poder hacerlo a la perfección.

Estaba central con el tinte temporal de color negro azabache, en mis ojos cargaba pupilentes de color gris acero, estaba observando lo que me iba a poner, consistía en un hermoso vestido hasta los talones con una abertura en la pierna izquierda de color plateado «Era de seda». Con unos tacones blancos hermosos, y además unos guantes plateados que combinaban a la perfección con el vestido.

Después de que estaba completamente lista, la encargada de arreglarme me puso anillos de Diamante perlas y cosas extravagantes.

«Pero estabas preciosa.

Y si estaba completamente irreconocible, pero el vestido remarcaba mis curvas y me daban el aire sensual que tanto me caracteriza.

Después de que estaba lista, entra Miranda algo distraída leyendo unos papeles.

—El General te está esperando en el área de despegue—Nunca aparto su vista de los papeles hasta que me puse de pie.

Ella levanto la vista y su mandíbula casi cayó a el suelo como en las caricaturas, sonreí complacida y le dije:

—Valeee, cierra la boca un poco—Eso pareció devolverla a la realidad y sonrió con malicia.

—Como me encantaría no darte la razón—Hizo una pausa y me observó de arriba a abajo— Pero estás tan jodidamente sexy que me has dejado sin palabras, Eres la puta ama. Me estás haciendo dudar de mi sexualidad.

No puse evitar una carcajada mientras caminamos hacia el aeropuerto.

—Tu no te quedas atrás, ese vestido te hace lucir sensual, estás bellísima Luciana—Ella me sonrió al nombrarla por su nombre encubierto.

Si ella también iba a ir a la misión.

—Te tomo la palabra—Ambas sonreímos y volvimos a caminar.

Llegamos y ella tomo asiento junto al general el cual estaba leyendo algo sin importarle el mundo, pude notar que observo a Miranda de reojo, y volvió a su lectura «Pobre Miranda y ella viéndolo con ojos de amor». No le di mucha importancia y tome asiento, me quedé observando cómo lucía el General.

Cargaba el cabello con el tinte temporal pero el de el era amarillo, unos pupilentes color miel, sinceramente le quedaba muy bien, es el tipo de hombre que todo le queda bien, y para completar un traje blanco que le daba ese aire de empresario.

«El empresario más follable.

¡CONCIENCIA!

«Si se te olvidó soy parte de ti así que, si yo lo pienso tu también.

Cállate.

«Aburrida.

Ignore completamente a mi conciencia, el vuelo comenzó y yo me puse a observar mi Lazio cabello (Ahora negro). Después de media hora de vuelo ya estábamos en la cuidad de la fiesta y cada quien tomo caminos separados.

Porsupuesto yo me fui con el general.

Estabamos en la limusina con un silencio reconfortante, cuando estábamos serca de llegar se acerco hacia mi y me susurro.

—Quiero que sepas esposa mía, que te voy a besar cuántas veces me plazca y no te vas a negar, ¿Entendiste?—Voltie a mirarlo y este estaba con un semblante serio.

ESCLAVOSWhere stories live. Discover now