ESCLAVOS

CAPÍTULO 18

Adám

Estábamos en camino, en camino a rescatar a Eva.

—Estamos llegando Adam, mis hombres están esperando a tu señal—Me avisa Mason sacándome de mis pensamientos.

—Perfectos ¿Están solos?—Pregunto mientras me acomodo mi arma.

—Si, vieron salir al señor Diego hace 5 minutos—El también se esta acomodando su arma—Por otro lado Maximiliano, llega en 2 horas. Solamente tenemos una hora para salir sin hacer mucho alboroto en dado caso de que algo salga mal, sales con Eva y esos locos hacia el mar allí habrá un bote esperándolos.

—Perfecto—Le digo dando por terminada la conversación.

Todos estamos terminando de arreglar para entrar y salir rápido de allí.

Estacionamos en algún lugar muy cerca de donde tienen a Eva, todo estaba listo así que di la señal por el intercomunicador.

Muy bien, vamos a entrar, estén listos y en posiciones. Nadie sale hasta que yo no la saque.

Así comenzamos a acercarnos, afuera solo habían algunos guardias, así que sigilosamente los neutralizamos, al entrar si habían muchos comenzado los tiroteos.

—Vamos abajo—Les dije a Damon, Demién, Damián y Harry.

Comenzamos a bajar las escaleras que imaginamos que daban al sótano, habían muchas mujeres allí, tal vez niñas pero no le preste atención yo estaba buscándola a ella, la necesito encontrar a ella. Aquí abajo habían hombres así que teníamos que deshacernos de ellos a medida que íbamos caminando, Harry le corto el cuello a un tipo que se le iba a tirar encima, los otros tres iban matando par liberarme espacio, llegamos a una puerta al final del pasillo. donde estaban 2 hombres, si es que se les puede llamar así, porque tienen la apariencia de un gorila.

—Holaaaa—Saluda Harry con una voz de un completo psicópata—Aquí esta la Evita Bonita ¿Verdad?

Estaba muy animado esta claro, estaba haciendo lo que más le gustaba. Matar.

Los tipos nos apuntaron, escuche las risitas psicópatas de todos mis acompañantes, de un momento a otro ambos hombres estaban desarmados contra el suelo, Demién tomo a uno de los hombres de un momento a otro torció su cuello hasta que este mismo sonó, el clásico crack  dando a entender que le había partido, Harry comienza a reírse como un maniático. Yo pongo los ojos en blanco pero me vuelvo inmediatamente hacia Damián.

—Adam—Apenas me volteo me lanza unas llaves.

Yo reacciono rápidamente las tomo en el aire, me doy la vuelta hacia la puerta la abro apenas lo hago la veo allí tirada, con visibles moretones en todo su cuerpo, tiene la piel muy pálida, de hecho tiene marcas de agujas. Su estado es lamentable, verla así solamente aumenta mis ganas de matar a ese desgraciado, no tenia, tiene, ni tendrá, nunca el derecho de tocarla nada mas al haberlo hecho este cabo su maldita tumba. 

Me acerque a ella, ella pensó que yo era el así que ni se molesto en levantar la cabeza, hasta el momento en el que noto que yo le estaba quitando esas cadenas, en ese momento su mirada se encontró con la mía, vi como la luz regresaba a su mirada que aun estaba algo perdida, en su rostro pude ver su evidente confusión, pero también había mucho alivio.

—¿A-adam?—Pregunta ella medio confundida.

—Si Bonita soy yo, vine a sacarte de aquí—Le dije con mucha calma tratando de tranquilizarla.

Ella no se opuso solamente me sonrió,  yo la cargue ella puso una mueca y pude observar que posiblemente tenga fracturas su condición no es buena, eso me preocupa.