Todos esperaban mi respuesta expectantes, me tomé unos segundos para pensar pero era bastante obvio.
Cata: Acepto...- Todos suspiraron aliviados ante lo que dije.-
Layra: ¿En serio Cata?- Parecía algo indignada.-
Cata: Layra... Se que es un sacrificio más que dar en nuestras vidas, pero tenemos que entender la situación.- Traté de explicarle.-
Nezu: Lamento que esto sea algo precipitado, pero espero que lo entienda señorita Layra... Y nos gustaría que ante cualquier problema, nos lo notifiquéis de inmediato, vuestras cosas están siendo empacadas mientras hablamos, así la mudanza será más amena.-
Layra: Entonces daba igual si ella aceptaba o no ¿Cierto?- Preguntó algo molesta.- De todos modos no es que tengamos muchas cosas que mover de sitio...-
Endeavor: Si, daba exactamente igual su respuesta.- Dijo tan tajante como siempre.- Pero el director quería saber vuestra opinión al respecto.-
Layra: Pues menuda alegría.- Dijo irónica.-
Present Mic: Bu-bueno, ya os podéis retirar...- Dijo tratando de cortar el ambiente tan tenso que se estaba formando.- Descansad y mañana estaréis en mejores condiciones y seguro que os llevaréis muy bien con vuestros guardianes o compañeros de piso... O como los queráis llamar.-
Ambas salimos del despacho y nos dirigimos a nuestra "casita" por última vez, Layra no estaba muy habladora... Comprendo como se siente, pero debe entender que aquí estamos de prestado y que demasiado amables están siendo con nosotras porque nos podrían haber echado o no rescatado con sólo el saber lo que soy y el riesgo que supongo para la fortaleza al completo. Cuando llegamos, ella se dirigió a su habitación y cerró la puerta de ésta de un portazo... Yo me llegué a la mía y tras darme cuenta de que lo poco que tenía estaba dentro de la única caja que se encontraba en la habitación, decidí ponerme cómoda y después me acerqué a la de Layrala para ver como estaba.
Cata: *Doy un par de toques a la puerta* ¿Layra?.- Pero no obtengo respuesta.- Layra... Se que estás enfadada, pero quiero hablar contigo... Por favor...- Escucho que hay movimiento dentro.- Layra, se que estás despierta... Por favor, déjame pasar.- Insisto algo apenada.-
Layra: Vaaaaaaaaleeeeeee.- Dice con pesadez.-
Al entrar vi que ella estaba sentada sobre su cama enojada, con el ceño fruncido y abrazada a su almohada.
Cata: Layra...-
Layra: ¿Qué? ¿Acaso no tengo derecho a enfadarme?- Pregunta molesta.-
Cata: ¿Puedo sentarme contigo?-
Layra: Como quieras...-
Cata: Bueno...- Digo mientras me siento en la cama a su lado.- Dime todo lo que piensas, no te interrumpiré... Pero luego tendrás que escuchar mi opinión al respecto... ¿De acuerdo?-
Layra: Vale...- Dijo con tristeza, se que estaba enfadada pero es evidente que tiene varios sentimientos mezclados.-
Cata: Venga, te escucho.- Digo mientras le miro a los ojos.-
Layra: *Suspira* la verdad es que esto no me gusta para nada, siento que nos separan para después mantenernos encerradas y custodiadas en "jaulas de oro"... ¿Con guardianes? Pfffff venga ya, son nuestros carceleros Cata, abre los ojos porque está más que claro...- Las lágrimas amenazaban por salir de sus ojos.- No quiero que todo acabe así después de todo por lo que las dos hemos tenido que pasar, sobre todo tu... No quiero que nos separen otra vez, se suponía que al viajar aquí estaríamos bien... Y mira como estamos acabando....- Dichas lágrimas empiezan a caer, haciendo que le abrace con fuerza y ella correspondió haciendo lo mismo.- No estoy enfadada contigo, pero no entiendo el por que aceptas tal cosa...- Rompe en llanto.-
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El pilar de mi corazón (All Might y tu).
FanfictionEn un mundo donde los super poderes no existen y la normalidad casi es una ley, una joven soldado inadaptada llamada Cataleya es sorprendida por la aparición inesperada de un adolescente pecoso, de cabello verde y algo revuelto y con unas pintas un...