Una vez en casa, Nina puso su teléfono a cargar y le escribió un mensaje a Daniel.
"Esa cosa me acaba de perseguir, casi muero" Le escribió.
"Dios, ¿lo ves? Deberías haberme dejado acompañarte, ¿estás bien?" Le contestó minutos después. "Sí, tranquilo" Dijo ella y después fue a la cocina a ver a su familia. Se sentaron a cenar, Nina no podía sacarse aquel momento de la cabeza, sólo de acordarse podía volver a sentir la adrenalina. - Nina, mañana te recogeré del instituto, iremos al centro comercial a hacer las compras para tu fiesta de cumpleaños- Le dijo su madre.
- Sí, está bien.- Contestó.
Cuando Nina terminó de cenar, se volvió a dirigir a su habitación y tenía un nuevo mensaje de Daniel: "¿Entonces mañana no saldremos?" Le preguntaba.
"Tengo que salir del pueblo, iré con mi madre a comprar los preparativos de la fiesta" Escribió Nina en el mensaje.
No hubo respuesta, y pasadas unas horas, Nina se metió en la cama y se quedó dormida.
Al día siguiente, a la salida del instituto se encontró con su madre, que la esperaba con la música alta dentro del coche. Nina no estaba de muy buen humor aquel día, decidió ponerse los auriculares y cerrar los ojos. Trató de encender su teléfono, y parecía ser que se había quedado sin batería, de nuevo.
- ¿Tienes un cargador aquí?, mamá-
- No, pero puedes escuchar música en la radio- Subió el volumen de la música y mientras Nina miraba por la ventana. Fue entonces cuando empezó a sonar en la radio un reportaje de las noticias, que de nuevo, trataba sobre encuentros de restos humanos. Nina miraba por la ventana cuando vio dos buitres alimentándose en el arcén, disfrutando lo que también parecían cadáveres con las plumas llenas de sangre. Nina volvió a la realidad, y volvió a escuchar lo que esta vez parecía una entrevista a los familiares de una de las personas encontradas sin vida.
- Dígame señora, ¿cómo fue la noche de la desaparición de Carla?-
- Carla salió hacia la casa de una de sus amigas por la tarde, me prometió que volvería antes de que anocheciera. Entonces, empezó a oscurecer, pero no me importó; aún no estaba oscuro del todo y sólo pensé que se había quedado entretenida jugando con su amiga.- Dijo la señora, y después continuó:
- Llamé a su amiga por teléfono cuando ya eran más de las diez de la noche, le pregunté por mi hija, y ella me dijo que Carla ya había salido de la casa, hacía dos o tres horas.- Después, la señora empezó a llorar desconsoladamente y Nina simplemente cambió de emisora, no quería continuar escuchando eso.
Llegaron al centro comercial, Nina metió un montón de alcohol y comida en el carro. Quería tratar de olvidarse de lo sucedido, y pensar que el día de su cumpleaños sería un día maravilloso, pero simplemente no podía, escuchar la voz de aquella apenada madre la tenía más preocupada todavía; un montón de pensamientos se le pasaban por la cabeza, sin parar.
Terminaron de hacer las compras, y después salieron del centro comercial para dirigirse a su casa. Nina estaba cansada, y casi de inmediato, se quedó dormida al subirse al coche.
ESTÁS LEYENDO
El temblor
HorrorEl libro cuenta la historia de cómo un grupo de amigos trata de sobrevivir a un fenómeno aberrante y siniestramente aterrador. La historia acontece en un pueblo situado en Segovia, llamado Carbonero el Mayor.