Capítulo 2.5

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Esa misma noche, cinco patrullas de policía se dirigían a la cantera del pueblo, tenía seiscientos metros de profundidad, y la gente la utilizaba para tirar trastos, basura y cosas que no les hacían falta, más que una cantera se trataba de un vertedero.
Dos policías se ataron una cuerda a la cintura, mientras que otros tantos sujetaban desde arriba. La madre de Boris también estaba allí, la pobre mujer no sabía cómo reaccionar, qué hacer, se quedó mirando a los policías a unos cuantos metros de distancia.
Un agente se le acercó. -Señora, acompáñeme por favor, necesito que vea esto- Le dijo, la señora fue detrás de él, mientras el corazón le latía cada vez más fuerte dentro del pecho.
La señora cayó al suelo y comenzó a llorar desesperadamente tras ver aquella imagen. El cuerpo de Boris estaba allí, pero le faltaba la cabeza, bajo el cuerpo había un charco de sangre enorme y tenía una pierna en carne viva, lo reconoció al instante.
Los policías realizaron un gran trabajo para encontrar la cabeza, pero no dieron con ella. La pobre madre ya no sabía qué pensar, ni siquiera se había preguntado qué le podría haber pasado a su hijo. Su marido y su hijo, llegaron media hora más tarde allí, después los transportaron en un coche de policía a la delegación, allí les hicieron firmar varios papeles y les sugirieron la posibilidad de donar algunos órganos de Boris, aquellos que estaban intactos.
La familia se negó, y a la mañana siguiente volvieron a su casa con una vasija de cerámica en cuyo interior se encontraban las cenizas de Boris, esa misma tarde un montón de gente se reuniría en el tanatorio para celebrar su funeral.
Nina y el resto del grupo hablaban en el garaje sobre lo sucedido, algunos lloraban, otros pensaban mirando a un punto fijo... Por la tarde, todos caminaron hacia el tanatorio, tras el coche de la funeraria. Una vez llegaron, sólo se escuchaban llantos; el hermano de Boris lloraba y golpeaba las paredes, su madre permanecía sentada en una acera de la calle, mirando hacia abajo mientras familiares lloraban apoyados en su hombro y la consolaban.
Todo era exactamente igual al sueño de Nina, caminaba con una copa de vino entre la gente. Entonces, Silvia se paró a su lado, "-¿Se me ha ido el maquillaje?-" Le preguntó.
-Qué va- Respondió Nina, después comenzó a contarle a Silvia el sueño que tuvo, y ésta miraba a su amiga sorprendida.
-¿Yo salgo en tu sueño?- Preguntó Silvia, y en ese momento, Nina se acordó de aquel momento, en el que Silvia llegaba de repente y todos se ponían a llorar a gritos, estaba a punto de decírselo a Silvia cuando de pronto, Cristina se plantó frente a la puerta del tanatorio, se arrodilló y soltó un grito de angustia; en ese mismo momento, todo lo que era de cristal, los ventanales y las copas, incluso la que Nina sostenía, estallaron.
Fue sorprendente, todo estalló al mismo tiempo, algunas señoras lloraban aterrorizadas con cristales clavados en el rostro. Nina y Silvia salieron de aquella escena sin daños, buscando a los demás integrantes del grupo para reunir a todos. Una vez todos juntos, decidieron alejarse un poco de la gente para poder hablar más tranquilos, y se quedaron de pies cerca del altar de su amigo.

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⏰ Última actualización: Aug 22, 2023 ⏰

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