El sueño

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Ni siquiera en el sueño dentro del sueño la eternidad es una vía entonces mejor sería que no vivan llenos de esperanza solo obren en el bien y amen la herida segundo a segundo porque no hay día, ayer, después o mañana.
Si una lágrima brotara ocultando sus sonrisas alcen el rostro frente a las multitudes, desnuden la nada, pues vuestra alma florecerá entre la supremacía divina, nacerán jardínes gloriosos de cada viva lágrima.

Antología de un sueño perpetuo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora