My Dirty Boy |•| KookTae (Terminada)

°•°_°•° Parte 36 °•°_°•°

Los labios de Jungkook besaban con delicadeza la piel canela de Taehyung, empezó por el cuello, dejando marcas de color violeta a su paso, descendió por las claviculas mientras las manos acariciaban el cuerpo desnudo.

Taehyung cerró sus ojos al sentir los labios húmedos recorrer su piel, se estremecía en cada beso y caricia que el azabache le hacía a su cuerpo.

Lo extrañaba tanto.

Se extrañaban tanto.

Jungkook lamió con suavidad los pezones, aquellos fueron endureciendose poco a poco bajo el tacto de su lengua, mordía y chupaba, Taehyung gemia extasiado de placer.

Lentamente siguió su camino de besos por la delgada figura, se detuvo en el abdomen, le dió suaves besos, caricias que extrañaba Taehyung. -Mi bebé.. ¿Me extrañaste?-

-Mucho- Respondió sonriente el bailarín

-¿Tú me extrañaste?-

-Si, cada segundo lejos de ti fue una tortura-

-Hoy te voy a torturar pero de placer-

Sonrieron con miradas cómplices, habían pasado apenas unos días, estar separados fue una experiencia nada agradable.

Jungkook continuó besando, al llegar a la entrepierna de Taehyung, con su lengua lamió lentamente la extensión, haciendo círculos en la punta, probando el presemen que brotaba del miembro.

Envolvió con su boca la gran erección, el vaivén de su cabeza era lento, no quería apresurarse, con Taehyung siempre quería disfrutar de cada momento juntos.

Su cabellera era desordenada por el bailarín mientras le daba placer, los jadeos y gemidos que escuchaba le hacían aumentar sus movimientos.

Sacó el miembro de su boca, levantó las piernas y el trasero de Taehyung quedó a su disposición, probó el lubricante natural que brotaba de la entrada al pasar la lengua por aquel agujero.

Mordió con suavidad las nalgas, llevó un dedo a la entrada y lo metió profundamente, las paredes lo apretaban al entrar y salir, unos minutos después introdujo otro dedo, los abrió en tijera para dilatar y prepararlo.

Aquel momento de su intimidad era su favorito, los gemidos de Taehyung aumentaban cuando se dedicaba a prepararlo.

Escuchar aquella voz gimiendo por él, lo enloquecía de placer.

-Kookie... por favor...-

-¿Que quieres?-

-Sentirte, muero por sentirte-

Jungkook sacó sus dedos suavemente para acostarse a su lado, alineó su miembro en la entrada, entró lentamente mientras besaba los hombros de su pareja, en aquella posición de cucharita empezó a moverse, no quería lastimar a Taehyung ni al bebé.

Y aunque apenas iba a cumplir dos meses, Jungkook estaba empezando a sentirse paranoico con los cuidados que creia Taehyung necesitaba.

Las penetraciones eran profundas y lentas, se besaban, se acariciaban en cada embestida.

Una mano de Jungkook alzó la pierna de Taehyung para poder entrar más profundo.

-¡Ohh Tae!- Le susurró. -Te extrañaba tanto- Sentir su miembro ser envuelto por aquella cavidad era glorioso, la presión era perfecta, no había nada mejor que aquella sensación.

-Yo a ti mi amor- Taehyung llevó una mano hacia atrás para agarrar el cuello de Jungkook y besarlo.

Estaban hechos el uno para el otro, Taehyung era y será el único hombre en su vida en muchos aspectos.