Casado desde muy joven, en un matrimonio de apariencias, Jeon escapa todos los viernes a los prostibulos, esperando recibir algo de "cariño", ese que no recibe en casa.
En la despedida de soltero de su amigo, es invitado a un prostibulo, pero este e...
Aprovechando la petición, escondería el deseo de besarlo, justificando que era por el préstamo.
Porque él no quería demostrar que moría por volver a sentirlo. Tampoco lo reconocía para sí mismo.
El primer beso fue algo único, nadie lo había besado con tanto deseo. Y estaba convencido que si no los hubiesen interrumpido, pasarían del beso a algo más.
Esa era su preocupación con este segundo beso.
Se encontraban abrazados, por el agradecimiento de Taehyung hacia Jungkook por el préstamo. Y aunque se atormenta por el miedo a lo que pueda suceder, se lanza a besarlo.
Cuando sus labios se unen, Taehyung se sumerge en una burbuja de sensaciones, es su segundo beso, y aún así se siente cómo si sus labios se reconocieran de años.
Este beso ya no es tan suave y sútil cómo el primero, es un beso urgido, desesperado. Queriendo fusionarse, en cada caricia.
Jungkook con su brazos intentó levantar un poco el cuerpo de Taehyung, acción que el contrario entendió y envolvió sus piernas en la cadera.
Caminó hasta el sillón, se sentó con Taehyung en su regazo a horcadas. En ningún momento abandonaron sus labios.
Los brazos de Taehyung envolvían el cuello de Jungkook, quien durante el beso acariciaba con suavidad su espalda.
No querían separarse, pero por falta de oxígeno a sus pulmones fue inevitable.
Unieron sus frentes, con la respiración agitada, Taehyung intentó decir algo, pero las palabras no salieron.
Jungkook colocó sus manos en las caderas del bailarín y sutilmente lo empujó lejos de su cuerpo.
Se miraron fijamente. -El apartamento estará listo en tres días, necesito tú número de telefono para mantener contacto-
Taehyung se sorprendió, pensó que irían más lejos y aunque anteriormente le dijo que no tendrían sexo, quería que le rogará, sentirse deseado era como una droga.
Pero Jungkook esa noche, le dio solo un beso. Un beso espectacular, pero solo un beso.
-Claro- Taehyung se levantó, buscó su teléfono. -Dame el tuyo y te marcó, así los dos quedamos con el contacto-
Jungkook le dio el número, y ambos se agendaron.
-Te llamaré en tres días- Jungkook le dio un beso en la mejilla de Taehyung, y salió de aquel cuarto.
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Al siguiente día por la mañana, Taehyung fue al banco, retiró dinero y se dirigió al prostíbulo.
HyungSik había citado a Minho para pagar la deuda y terminar con aquel trato.
-Hola bonito- Lo besó. -Minho no ha llegado-
Taehyung se sintió extraño con el beso, pero no le dijo nada. Antes no le molestaba, pero ahora se sentía algo... raro.
