↳ ⧣💻📞┋Un amor como el atardecer fue el que vivimos los dos. Al principio todo era lindo, lleno de vida, muchos colores, pero al caer la noche todo moría y se tornaba oscuro, llegando el fin de todo, con ello el amor.
❝Juraste amor eterno, cuando n...
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narrador !
2020
La lucha con la depresión y la ansiedad eran fuertes para Rachell, sumando la explotación universitaria que había tenido los primeros meses del año. Seguía viendo el perfil de Instagram de Iván eso la colocaba en un estado critico.
Iván colocaba fotos de él mismo y de ellos dos juntos. Ella era linda, su sonrisa era brillante, no se veía mala, al contraria era deslumbrante y llamaba la atención de cualquier a simple vista, eso lograba apachurrar el corazón de la joven.
Golpeaba su mesa con fuerza mientras lloraba intentando deshacer el dolor, intentándolo olvidar.
Ocho meses y medio habían pasado desde la última vez que sus almas chocaron, desde la última comunicación. Desde aquel mensaje que rompió el corazón de aquella morocha ojos brilloso, apagando tu sonrisa interna, su felicidad consigo misma.
¿Podría alguien quitarte tu magia con mentiras, falsas promesas e ilusiones? Sí.
Su pecho se comprimía todas las noches por tanto llanto, sus manos temblaban, el estrés emocional la consumía de mas, aún le dolía.
Comenzó a tener desorden alimenticios. Todo lo que consumía era por obligación y cuando verdaderamente quería hacerlo, lo vomitaba todo. Se sintió tan débil al saber que tendría que seguir una dieta para adaptar a su organismo, mas al enterarse que sufría de anemia.
─ Cariño, te traje el desayuno, ¿puedes abrirme por fa? ─ pidió su madre haciendo que está inmediatamente abriera la puerta.
Rachell todavía seguía con la pijama, su cabello despeinado y su peluche en mano, aquel que le obsequio Iván.
─ Uhhh ensalada de frutas. ─ se emocionó como niña chiquita soltando un chillido.
─ Como te gusta, también hice mate si queres. ─ mencionó la madre.
─ Más tarde, tengo que hacer la tarea de la facultad y hacer que el profesor dejé de joderme. ─ le restó importancia sonriendo.
Marisol al observar calladamente como su hija consumía su desayuno la analizo de pies a cabeza. Ya no tenía tantas ojeras, sus ojos no estaban tan hinchados, al parecer poco a poco se mejoraba.
─ ¿Cómo vas con la dieta, te sientes mejor? ─ le preguntó sacando conversación.
─ Me siento re piola, la comida no me da tanto asco como antes. ─ respondió con la boca llena.
─ Me alegra mucho. ─ se sinceró Marisol acariciando la melena corta y sedosa de su hija.─ ¿Y el trabajo?
Rachell había comenzado a trabajar en una peluquería por las tardes, ganaba bastante bien.
─ Re bien ma', está semana me paga y casi tengo todo reunidos para cubrir los gastos de la mudanza a Buenos Aires. ─sonrió.
A Marisol le preocupará que ella se volviera a encontrar con Iván luego de meses. Ella le comentó a su madre la buena idea de irse a vivir a Puerto Madero en el 2021 o quizás en 2022, no lo había pensado bien.
