↳ ⧣💻📞┋Un amor como el atardecer fue el que vivimos los dos. Al principio todo era lindo, lleno de vida, muchos colores, pero al caer la noche todo moría y se tornaba oscuro, llegando el fin de todo, con ello el amor.
❝Juraste amor eterno, cuando n...
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narrador !
La alarma sonó y Rachell se sobresaltó de su cama quedando totalmente sentada, desconcertada y con sus mejillas sonrojadas.
¿Había soñado la declaración de amor de Rodrigo?
─ ¿Que chotas me pasa? ─ pronunció con confusión jalándose las puntas del pelo.
Se quito las sabanas de encimas dejando ver la pijama de cerezas que Rodrigo le regaló semanas atrás, yendo hacia el gran espejo que tenia su tocador, viendo como su cabello liso estaba totalmente esponjado, totalmente despeinada y con mas ojeras que vida.
Un hilo de baba salió limpiándolo de inmediato, sacudió un poco su cabeza despertándose así un poco más. Peinó suavemente su melena con sus dedos para luego estirarse y dirigirse al baño.
Se dio un baño de agua fría despertándose por completo, para luego cepillarse los dientes y aplicarse crema y protector solar en el rostro y brazos. Su vestimenta era cómoda, de pijama paso a usar unos jean negros holgados y un clásico top negro, acompañado de una chaqueta escolar del mismo color y unos botines bajos.
Rachell luego del sueño, tenía un sabor amargo en su garganta, o mas que todo nervios por confundir. Ese sabor amargo no lo pasaría con casi nada, mucho menos por un desayuno hecho con sus propias manos, así que tomó su cartera, su celular y sus lentes colocándoselos como cintillo recogiendo su cabello en la parte delantera, para salir de su casa y cerrar con seguro.
Su nariz le dolía un poco, días atrás había ido a hacer un par de piercing. Dos en la nariz y se perforó tres veces las orejas, le gustaban mucho, era algo que había heredado de su madre y su abuela.
─ No mami, ya te dije que por acá todo está piola. ─ respondió con un tonó natural mientras caminaba.─ Te dejo, porque capaz al pasar la calle quedo como una milanesa si no me fijo, te amo muaaa. ─ se despidió de su madre colgando la llamada.
Pasó la calle entrando de inmediato a la cafetería, se acercó al mostrando donde tomaron su orden de manera rápida ya que era cliente fija. Pidió un jugo de naranja, dos sándwich grandes de miga, galletas de vainilla y chocolate para llevárselas a Rodrigo, y un brownie.
Se sentó en una silla cercana a la ventana y comenzó a comer mientras veía boludeces en su celular. Le gustaba mucho hacer eso cuando desayunaba, porque solo era ella y solo ella. Lo hacia cuando iba con Rodrigo igual, pero disfrutaba mucho su compañía.
Rachell ya había hecho su vida en Buenos Aires, tenía amigos, pero no se adaptaban a la idea de estar con ellos siempre por estar totalmente acostumbrada a su soledad, cosa que estaba bien, pero perjudicaría su vida social.
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Iván point of view !
flashback un mes atrás
─ Entonces.. ¿te gusta? ─ le pregunté de manera incrédula, rogando a que me negará todo.
─ Si amigo, espero y me entendas, pero posta que no haré nada si vos la queres amigos, vos sabes que respeto mucho eso, aún así no hayan sido nada mas que amigos. ─ me contestó mirándome fijamente.
No podía reprocharle algo que sin querer paso, o que no hice nada mas que huir para frenarlo. Tenía novia, no podía tirar tres años de relación, solo por no perder a Rachell, sabiendo que Rodrigo es buen pibe para ella.
O al menos él no iba a huir de los problemas por miedo a que no funcionarán.
─ Ahora la perderé para siempre. ─ susurré entre mi.
─ ¿Vos que pensas? ─ me miro.
En que no quiero verlos juntos.
─ En muchas cosas. ─ suspire.
─ Podes decirme con toda confianza, somos amigos desde que llegaste a acá, por una nena no nos vamos a agarrar por los pelos boludo, yo a ti te re quiero y lo último que quiero es arruinar nuestra amistad.
Yo asentí, suspiré y luego hablé para no sonar tan alterado.
─ Si.. está todo bien ─ respondí entre un hilo.─ ella le encantaba ver una y otra vez conmigo su película favorita, la dama y el vagabundo, no soportaba que la jodiera esa hora y media que duraba la película, se enojaba y arrugaba su nariz e hinchaba sus mejillas demostrando que estaba muy molesta, se reía de cada pelotudez que hacia, no le gustaba recibir un no por respuesta cuando me convidaba y siempre hacía bailes con sus manos vacilando cuando agarraba mi celu para tomarse fotos. ─ sorbí mi nariz.─ Boludo, la extraño una banda. ─ no pude mas y ahí me rompí.
Mis acciones fueron la que cagaron todo. Yo la volví así, no tomé en cuenta el como se sentía y a estas alturas siento que todo me esta quemando, no debí hacer nada durante estos años que he pasado sin comunicarme con ella, intenté remediar todo, pero me mandé demasiadas cagadas.
Emi no sabe casi nada de esto, solo hice lo que me pidió para que la relación avanzará. Que bloqueará a Rachell y siguiera nuestra relación sana.
¿A que costo?
Rachell estuvo en cualquier momento de mi vida, en altos, bajos, términos medios e inclusive cuando me tumbaba en el suelo a llorar como un nene de cinco años exigiendo que le diera su mamadera con leche para quedarse quieto.
Emilia, fue alguien random que apareció en mi vida, me flecho con su belleza y su carisma, pero poco a poco se fue volviendo tóxica, yo como buen gil de mierda le hice caso. Le hice caso a alguien que ni hizo todo lo que Rachell ha hecho por mi, mi vida cada día se vuelve mas una poronga.
mi corazón sigue gritando Rachell.
todo esto se siente como un sacrifico el sacrificio de dar mi vida por ella
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