Capítulo 27

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Merlot

   —Es un sitio muy lindo —alagó (Tn) el parque al que habían llegado—. Me gusta mucho la naturaleza.

Law y la castaña caminaban a paso lento por un andador de madera que se extendía a lo largo del parque, rodeado de árboles de diferentes especies. Al ser el último mes del invierno ninguno tenía flores aún, únicamente se podían apreciar los retoños y unas cuantas hojas en sus ramas. Había poca gente, algo que el ojigris agradecía, pero lo que no lo dejaba tranquilo era que el viento soplaba cada vez más fuerte, trayendo con él nubes que no cubrían el cielo hace veinte minutos.

   —¿Ah sí? —la castaña asintió levemente— ¿Qué es lo que más te gusta de la naturaleza? —preguntó con curiosidad.

   —El océano —le respondió con un brillo en sus ojos—. Desde la ventana de mi habitación en Australia podía apreciar el atardecer todos los días. Sentía como si estuviera dentro de una fotografía.

   —¿Extrañas tu hogar?

   —Extraño la vista de la ventana de mi habitación —exclamó divertida—. Pero mi hogar está donde sea que Kid se encuentre.

   —Que linda —le sonrió Law de medio lado.

Una ráfaga de aire frio chocó contra sus cuerpos, provocando un escalofrío en la espalda de Law.

   —¿No tienes frío, (Tn)-ya? —preguntó tontamente. Ninguno de los dos llevaba suéter en esos momentos, no sabía que solución proponerle si le respondía que si.

   —No, pero tengo un mal presentimiento —le hizo saber la chica.

«Definitivamente, alguien nos está siguiendo» activó su estado de alerta agudizando sus sentidos.

   —¿Qué pasa? ¿Hay algún problema?

   —Creo que mi predicción fue incorrecta —volteó hacia el cielo para ver que estaba completamente cubierto de nubes grises.

   —¿Entonces gano yo? —Law no estaba entendiendo muy bien la situación—. El cielo se ha nublado, pareciera que tú predicción fue acertada.

   —No. Fue incorrecta porque no lloverá dentro de 25 minutos, faltan menos de 5 para que comience el aguacero.

   —Entonces será mejor que volvamos, estamos lejos de la entrada y tardaremos en llegar al auto.

Las intenciones de (Tn) eran regresar lo antes posible, aún no había identificado a la persona que los seguía y no quería poner en peligro a Law si se trataba de un enemigo. Aunque la parte del aguacero tampoco era mentira, pero no deseaba que el ojigris se ofreciera a cargarla hasta donde habían dejado estacionado el auto.

«¿Un aliado de Doflamingo?, ¿Un antiguo enemigo?, ¿Alguien de la JZI?... ¡¿DÓNDE CARAJOS ESTÁS?!» Descartaba la última opción, si fuese alguien de su equipo le habrían avisado.

En su camino de regreso a la entrada del parque, justo cuando pasaban junto al lago, la lluvia comenzó a caer del cielo tal y como cuando una persona abre la regadera de la ducha. La ropa de ambos quedó empapada en menos de dos minutos, habían empezado a trotar despacio para avanzar más, pero Law no quería ir más rapido por temor a que la castaña se fuese a tropezar con su calzado, mientras que (Tn) no quería ir tan a prisa para intentar detectar a la persona que los seguía.

No había ningún techo o toldo dónde resguardarse de la lluvia, además, se notaba que el aguacero iba a durar un buen rato, por lo que permanecer mojados no era una opción a menos que quisieran pescar un resfriado.

ENTRE NOSOTROS  (Law x Ace x Lectora)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora