Una forma de protegerse del emperador [EDITANDO]

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Capítulo corto para anunciar que de vuelta, nos vemos en unos días.<3

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El campo de batalla estaba envuelto en caos. Yoo Joonghyuk lideraba valientemente a su delegación, acompañado por la división de caballeros de Sung Jinwoo.

El estruendo de las armas chocando llenaba el aire, mientras los soldados luchaban con ferocidad. Yoo Joonghyuk manejaba su espada con precisión, cortando a través de las filas enemigas y liderando a sus hombres con determinación. Todos los caballeros destacaban a su manera, con movimientos hipnotizantes, una lucha de sangre e intimidación.

Sin embargo, a medida que la batalla avanzaba, algo parecía estar fuera de lugar. Los bárbaros no se rendían fácilmente, y su resistencia parecía inusualmente feroz. Algunos de ellos luchaban con una ferocidad sobrehumana, mientras que otros mostraban un destello de desesperación en sus ojos.

Jung Heewon lo notó, luego de derribar a dos caballeros, ella pudo ver el vacío en sus ojos y sabía bien que eso no era simplemente la muerte corriendo por sus venas. El aura de estas personas era algo con lo que ella ya se había enfrentado en la Academia, por ende, rápidamente buscó con la mirada a su amigo.

De repente, ella se estaba dando un breve respiro de la lucha, logró pasar desapercibida y no tocar a ningún enemigo que se cruzara nuevamente en su camino, Heewon se acercó a Yoo Joonghyuk con una expresión de preocupación en su rostro y de un momento a otro ambos estaban cuidándose las espaldas.

"¿También lo notaste?" Preguntó Heewon, siendo lo menos directa posible. Nunca se sabía la amenaza que podría estarlos vigilando en ese instante.

Los ojos de Yoo Joonghyuk se entrecerraron mientras observaba a los bárbaros que aún luchaban. A medida que atacaba, comenzó a notar ciertos patrones en el comportamiento de sus enemigos. Las miradas perdidas, los gestos torpes y la irracionalidad en su lucha, todo apuntaba a una posesión.

Una posesión demoniaca como la de Kim Dokja en la Academia.

"Sí, pero no podemos detenernos ahora"

Heewon también lo sabía, si ellos daban un paso atrás en este momento... podría ser su final. Ellos se habían lanzado a la boca del lobo. Por un descuido podrían morir muchos inocentes que esperaban acabar con todo rápidamente y volver a sus casas.

"Déjame esto a mí" ella parecía tan confiada. Aún así, el príncipe seguía con desconfianza, la chica rodó los ojos con una sonrisa. "¡Hey! ¿Cuánto te he fallado, principito?"

La chica dio un paso al frente y luego le guiñó un ojo de forma chistosa, aquella mujer que encontraba la forma de divertirse incluso en el campo de batalla, a pesar del cansancio en su corazón, ella deseaba salvar a todos los que estaban ahí peleando junto a ella. Ella llegaría al imperio pronto y le haría un juramento de caballero a Kim Dokja.

Protegería su mundo.

La chica levantó su espada e invocó una antigua magia tomada prestada de la Diosa, desencadenando "Hora del Juicio". Un aura dorada con vestigios rojizos envolvió su cuerpo, y sus ojos brillaron ferozmente. Una ráfaga de energía mágica emanó de ella, extendiéndose hacia los bárbaros.

Era abrumador, era deslumbrante, y eso animó aún más los corazones de los caballeros combatientes. Su magia se manifestó en una serie de ataques deslumbrantes, arrasando a los que se interponían en su camino. El suelo temblaba bajo sus pies, y el viento aullaba mientras liberaba una fuerza destructiva imparable.

La "Hora del Juicio" que se desató sobre los bárbaros y los eliminó uno tras otro, incapaces de resistir. Normalmente, el poder divino rechazaba el poder demoniaco, así que la tarea era incluso más fácil.

Como los corazones de los caballeros habían sido llenados de esperanza, Yoo Joonghyuk aprovechó para contraatacar con más fuerza. Los nobles caballeros lo siguieron con los brazos abiertos. Siguiendo el ejemplo de Heewon, lucharon con una ferocidad y precisión implacables, dirigiéndose hacia la victoria.

La idea era no dejar a ninguno con vida, pero Lee Hyunsung tenía algo en mente. No es lo más ético, ciertamente era algo que muchos criticarían, pero le dio el consejo a su alteza imperial.

"Su Alteza, deberíamos investigar más a fondo con ayuda de los bárbaros capturados" fue lo que dijo cuando entró en la carpa para dormir.

"Me gusta como piensas" dijo Jinwoo.

"Qué haces acá" No era una pregunta, era una forma de decir 'lárgate' camuflada. Yoo Joonghyuk estaba ya cansado de Sung Jinwoo.

Y estaba demasiado relajado en su cama.

"Quiero conocer los secretos de un genio con la espada" murmuró el chico, girando un poco para mirarlo.

Jung Heewon arrugó un poco sus facciones. A ella tampoco le agradaba del todo el duque, pero era útil. "¿Pueden callarse? Yo creo que Hyunsung tiene razón. No sé si lo notaron ustedes también, pero, esa gente estaba poseída"

"Sí, lavado de cerebro de primer grado, no es muy eficiente, por eso no lograron vencernos, pero si fueran menos en número lo hubieran hecho"

La mirada que intercambiaron con Hyunsung lo decía todo. Si hubieran sido los pocos soldados de un inicio, ellos serían los que quedaron en el campo de batalla, un escalofrío pasó por la espalda de Hyunsung. Eso era lo que la segunda reina esperaba.

"Es posible que la segunda reina haya utilizado un juego sucio para controlar a estas personas. Están siendo usadas como marionetas" dijo Jinwoo.

Jung Heewon solo se río desganada. "Así que entonces no estaba en conversaciones con los bárbaros, estaba controlándolos. Que desagradable"

Estaba claro que la guerra apenas empezaba.