❝child❞ lautaro martínez

17

ésta última semana fue un caos, estresante. Lautaro le dijo a Agustina que su casa ya estaba en condiciones como para que él pueda volver a vivir ahí y también habló con Nonna, no sé qué hablaron, ninguno de los dos me quiso decír.

Agustina va y viene, se queda en lo de Lautaro unos días, y los otros se queda con nosotras.

con Nonna volvimos a hablar, más tranquilas, me hizo prometer alejarme de Lautaro, que primero la pareja decida qué hacer y que después vea yo que hacer. Por lo visto la pareja sigue en pie, juntitos, felices. Por lo que Nonna me dijo que no me meta.

Y eso estoy haciendo, haciendo la mía, Chiara patea mucho, ya casi siete meses.

LAUTARO

—Bueno mi amor, me voy a ir yendo ¿si?— Agus besó mi chachete. — Te amo.

le sonreí sin mostrar los dientes y la vi irse por la puerta de mi apartamento.

¿hasta cuando va a fingir demencia?

~cinco días antes~

terminé de acomodar las últimas cosas, y me apoyé contra la pared, cansado.

—¡que hermosa que es!— exclamó Agustina, que recién llegaba.

asentí.

—¿podemos hablar?— le pregunté.

—obvio amor.— se sentó sobre en el sillón. —¿es urgente? tengo que ir a mi service.

—Si, lo es.

—ay... no me asustes.— rió.

—esto es algo muy difícil para mi decirte...— tragué saliva.— te lo tendría que haber dicho antes, pero recién ahora tengo el valor de decírtelo.

Agus me miró confundida.

—Quiero que sepas que cual sea tu decisión la voy a aceptar, y que lo que hice no fue nada en contra tuyo.

ella asintió.

—¿qué hiciste Lautaro?— su voz ya se empezó a cortar.

— te fui infiel. — confesé.

la reacción de Agustina fue abrir unos centímetros su boca, tomando aire, mientas veía una y otra, y otra lágrima rodar por su mejilla.

—¿q-qué? ¿cuando?— sollozó. Se agarró de sus mangas, tapando sus manos.

—hace unos meses...

—¿una vez?— me miró los ojos.— Lautaro, ¿seguiste en contacto con esa?

asentí.

ella se desarmó en llanto, sollozando, mientras se secaba las lagrimas con su manga.

—Perdón Agus...

ella negó, aún llorando.

—¿te enamoraste de ella?— la esperanza en sus ojos se hizo visible, y a mi me daba lastima.

¿me enamoré de ella?

me quedé callado.

y el que calla otorga.

—Sos una porquería.— levantó la voz.

—ya sé... por eso si queres cortar todo lo voy a entender. Agus yo quiero que estes bien.

ella rió sarcástica.

—No.— negó.— no vamos a cortar.

la miré sorprendido.

— vos dijiste claramente que la decisión que yo tome vos la ibas a aceptar, y esta es mi decisión: nosotros vamos a seguir juntos, como antes.— se arregló la ropa.— no voy a permitir que vos quedes libre para poder estar con quien sea la hija de puta con la que estuviste. ¿me escuchaste?

se levantó y agarró su cartera.

—Nos vemos.— se despidió abriendo la puerta, y yéndose. Dejándome totalmente sorprendido.

volví a la actualidad, ese recuerdo se me viene a la cabeza una y otra vez.

no pude hacer lo que la abuela de gab me dijo que haga, desde hace una semana que Nonna y gab piensan que amo a agustina y que la elegí a ella.