Tras varios años estando solo, wilbur cree que es momento de tomar los consejos de sus amigos y empezar a darse una oportunidad para conocer a alguien.
Claro que, no esperaba que ese "alguien" fuera el peculiar y carismático maestro de su hijita ta...
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Cuando la hora de receso llegó, tallulah estaba en negación sobre querer salir a la hora de receso, pues aun no tenia amigos, y no sabia a donde ir. Afortunadamente, su maestro, fue amable con el y le permitió quedarse en el salón, mientras el terminaba de calificar las actividades impuestas rato atrás.
En un momento dado, un maestro ingresó al salon, un hombre de curiosa bandana azul y delineado que soltaba suspiros cansados; eso le pareció curioso a la pequeña niña.
"No manches quackity, estas en tu receso, que haces tu aqui?" —El hombre le cuestionó, mientras el otro le miraba con una sonrisa.
"Ah pues aquí ando, rascándome el ombligo ya sabes- ¡Pues califico trabajos! Algo que deberías estar haciendo, yo soy maestro responsable" —exclamó este, mientras continuaba calificando.
"Si, como sea. Como va bolbby eh? Siendo el mas chingon verdad?" —Tallulah abrió los ojos con sorpresa, había dicho una palabrota.
"De hecho tu chamaco es al que peor le esta yendo. Ponte las pilas que si no tu hijo reprueba las multiplicaciones" —notó como el de bandana le miraba ofendido, a lo que el otro rió— "no manches, ya nueve años y todavía sin saber multiplicar? No no roier, todo mal contigo"
"Ey! Los niños aprenden a su ritmo! Mira nomas este trabajo, hay mas dibujos que multiplicaciones, este si esta bien jodido" —quackity tomo la hoja entre sus manos para calificarlo, abriendo los ojos en grande cuando notó a quien pertenecía.
Tallulah solo ladeó la cabeza curiosa al notar la mirada de pánico de su maestro hacia ella; sin embargo, dejo de verlo cuando un niño se sentó frente a ella, tenia una lonchera de guerreros.
"Hola" —dijo el niño, mirándole fijamente. Tallulah parpadeó varias veces confundida.
"Hola.." —saludó con cierta timidez. El niño abrió la lonchera, dejando ver dos tostadas con aguacate encima. Extendió una hacia tallulah, quien le miró aun mas confundida.
"Eres la hija de philza?" —preguntó de la nada, la niña negó— "soot? El señor soot?"
"Oh! Si si si! Mi abuelito se llama philza soot"
"Mi papá es amigo del tuyo. Soy Carlos, pero mi papá me llama chayanne, no tengo idea de porqué" —confesó el niño con expresión extrañada. La niña se rió.
"Así se llama un cantante o no? Mi papá también canta! Pero no es conocido" —la niña le compartió de su plato con manzanas al azabache frente a el, con una pequeña sonrisa— "yo soy tallulah, compartamos comida si?"
El niño frente a ella asintió, y entonces ambos se pusieron a comer mientras hablaban y reían entre ellos. Mientras los niños interactúaban, ambos adultos seguían hablando sobre la hoja que debía calificar el maestro de aquel salon.
