Quackity llegó totalmente agobiado a su hogar, dejando caer su mochila con cosas escolares en el sofa.
"Ya llegué!" —gritó, y cuando se dio cuenta de su acción sacudió su cabeza, le estaba hablando otra vez a la nada.
Soltó un suspiro pesado mientras se estiraba completamente, escuchando sus huesos hacer ese pequeño sonido cuando truenan; nuevamente suspiró, pero esta vez mas relajado yendo directamente a servirse un bowl con cereal.
Era muy temprano para comer cereal? Si, pero le importaba? No, ni un poco.
Así que con su cereal preparado y prácticamente una pijama puesta, se fue a sentar en el sofa prendiendo la televisión, viendo primero un poco las noticias, y al notar que eran únicamente accidentes y desgracias terminó por poner un canal de películas aleatorias.
Comía su cereal en silencio, mientras miraba aquella película que ni siquiera sabia su nombre, y del cual probablemente olvidaría la trama en un buen rato.Miró un momento el brazalete en su mano, dejando el cereal en la mesita frente al sofa, recostándose para seguir viéndolo con detenimiento.
Se veía un poco descosida, pero no quería arreglarlo, sentía que perdía su.. esencia.Poco a poco los párpados le empezaron a pesar,en cualquier momento caería dormido, y suponía, seria por un largo rato...
"Tu tu tu dora! Tu tu tu dora! Tu tu tu dora! Tu tu tu dora! vamos! . . ."Aquella intro de la caricatura sonaba fuerte, muy fuerte. Quackity trataba de concentrarse en los apuntes de sus alumnos, pero la maldita dora no lo dejaba pensar, era irritante a sus, oídos adultos.
"Mija, le bajas a la tele tantito porfas? Es que no me deja concentrarme" —pidió el azabache, a lo que la nombrada le miró de forma despectiva. Una, pequeña niña de cabellos castaños oscuros y ojos azulados
"Pero yo quiero oír dora fuerte!"
"Mija.."
"Dora fuerte! Dora fuerte, dora fuerte, dora fuerte!" —quackity suspiró rendido, yendo al sofa, justo donde estaba su hija.
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🏹𝗖𝗨𝗣𝗜𝗗 | 𝘘𝘶𝘢𝘤𝘬𝘣𝘶𝘳
FanfictionTras varios años estando solo, wilbur cree que es momento de tomar los consejos de sus amigos y empezar a darse una oportunidad para conocer a alguien. Claro que, no esperaba que ese "alguien" fuera el peculiar y carismático maestro de su hijita ta...