CAPITULO 7

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Era adorable. Seokjin estaba totalmente encantado con Taehyung. Su lenguaje podría necesitar un poco de trabajo, pero era el hombre más intrigante que Seokjin había conocido en años. Seokjin disfrutaba con sólo caminar con él, escuchándolo hablar. Las pequeñas miradas vacilantes que recibía tenían su sangre en llamas. Si Sehun no hubiese aparecido antes, Seokjin estaba bastante seguro de que Taehyung habría intentado besarlo. Seokjin era lo suficientemente honesto consigo mismo para admitir que habría permitido al magnífico hombre seguir adelante con su plan. Quería ver lo que esos exuberantes labios podían hacer.

Con ese pensamiento en mente, Seokjin empezó a rondarlo, moviéndose más cerca de Taehyung con cada paso que daba. Cuando llegaron al final del corredor, Seokjin dio un paso hacia Taehyung hasta que pudo dirigirlo a la esquina donde se apilan varios fardos de heno. Sabía que estaba invadiendo su espacio personal. La tartamudeante inhalación del hombre le dijo que no estaba en contra de ello. El calor encendiendo los ojos verdes azulados de Taehyung le dijo incluso más. Le invitó a más.

Seokjin extendió la mano y tiró de uno de los mechones de Taehyung. —¿Siempre te dejas este color de pelo?

Su pelo era de un tono turquesa que le daba un aspecto único. No uno que Seokjin llevaría, pero único, no obstante. En realidad, parecía adaptarse a Taehyung y resaltar aún mas sus bellas facciones.

Seokjin tiró hasta que Taehyung lo miró. Se inclinó y frotó sus labios juntos, su lengua lamiendo el borde de los labios de Taehyung hasta que se separaron, y luego Seokjin ahondó dentro, explorando, conquistando, y exigiendo que el hombre en sus brazos se sometiera a su pasión. Taehyung no lo defraudó. Se derritió contra Seokjin, con las manos apretando la chaqueta de Seokjin para acercarlo más.

Los dulces gemidos de Taehyung estimularon el deseo de Seokjin hasta que dolía. Su respuesta al beso zumbó a través de la sangre de Seokjin. Deslizó la mano por la cadera de Taehyung, acercándolo más. Sus rodillas casi se doblaron cuando la dura polla de Taehyung presionó contra la suya. Necesitaba más.

—Abre las piernas habibi —susurró Seokjin.

Tan pronto como Taehyung lo hizo, Seokjin lo levantó sobre el fardo de heno más cercano y se colocó entre sus piernas. Seokjin deslizó las caderas de Taehyung hacia el borde del fardo de heno hasta que sus pollas se frotaban juntas una vez más. Observó los ojos de Taehyung buscando cualquier signo de sufrimiento mientras bajaba lentamente la cremallera del hombre. Los ojos de Taehyung se oscurecieron a fragmentos mas azules. Empezó a jadear. Perfecto.

—Tan hermoso habibi.

—¿Hab-qué?

—Habibi. Significa querido o amante.

—Está bien —susurró Taehyung.

Seokjin sonrió, para ser mas exactos significaba mi amor, pero sin pensar demasiado en ello luego fue por otro beso, presionando sus labios en los de Taehyung y a continuación cubriendo su boca. Su hambre se elevó, volviendo su beso exigente. Tan pronto como la cremallera de Taehyung estuvo abajo, Seokjin metió su mano y envolvió sus dedos alrededor de la sorprendentemente gruesa circunferencia del hombre. Bajó la mirada mientras sacaba el pene de Taehyung fuera de sus pantalones.

—Eso es... —Seokjin se humedeció los labios. —Este es un pene muy bonito Taehyung.

Taehyung se estremeció contra él. —Me alegro que te guste, pero ¿podrías por favor hacer algo con él?

Las cejas de Seokjin subieron mientras miraba a Taehyung. Había tal necesidad en la voz del hombre que Seokjin lo sintió en sus bolas. Se pusieron pesadas y doloridas. Quería enterrarse en el apretado calor interior de Taehyung, quería que Taehyung se perdiese en las sensaciones que Seokjin podría crear en él, y deshacerse bajo sus manos, pero ahora no era el momento. Sería un momento, sin embargo. Seokjin silenciosamente se prometió que tendría a Taehyung de alguna manera.

LA NAVIDAD (Libro VII)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora