Mami, no te vayas de nuevo

21 5 0
                                    

Sasuke quedó más que confundido cuando vio bajar a su hijo contento  de la mano de Karin, y aún cuando él ansiaba una explicación, ni  siquiera tuvo la oportunidad de preguntar algo, pues Kisho echó a correr  halando la mano de su madre para lleva...

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Sasuke quedó más que confundido cuando vio bajar a su hijo contento de la mano de Karin, y aún cuando él ansiaba una explicación, ni siquiera tuvo la oportunidad de preguntar algo, pues Kisho echó a correr halando la mano de su madre para llevarla con sus amigos. Tampoco fue algo que pudiera preguntar minutos más tarde, o a horas cercanas, pues Kisho no se despegó de Karin más allá para ir al baño a pesar de que sus amigos no dejaban de insistirle que fuera a jugar con ellos.

En todo el día Sasuke no dejó de sentirse furioso, porque de alguna manera sentía celos de que la atención de su hijo fuera robada, pues siempre fue él el único que estaba para Kisho en todo momento –porque Itachi rara vez estaba−, y aunque sólo habían sido unas horas de convivencia en que prácticamente había sido ignorado, no podía dejar de sentirse desplazado. Sin embargo, tampoco podía decirse que odiara la situación al cien por cien, pues no podía negar la gran felicidad que iluminaba la cara de su hijo y que podía oírse en sus palabras cada vez que decía "mamá". Lo único que lo animaba cada que veía el reloj, era que ya pronto todo acabaría... o al menos eso creyó, porque cuando planeó todo el asunto de Karin como madre, no tuvo en cuenta un importante detalle.

−¡No puedo esperar a que vayas a casa con nosotros! –exclamó Kisho con felicidad de la mano de Karin, quien tampoco había contemplado dicho asunto− Quiero que veas mi cuarto y seguramente papá ya no se sentirá solo ahora que estas con nosotros.

Karin iba de la mano de Kisho para dejarlo con Sasuke ahora que la fiesta había terminado, y justo al llegar frente a los Uchiha mayores, Kisho hizo tal comentario de repente. Pelirroja y azabache intercambiaron miradas preguntándose mutuamente sobre el plan, pero ninguno había pensado en nada, pues cuando hicieron el acuerdo, estaban más preocupados por la reacción que tendría su hijo en el encuentro que cualquier detalle posterior a ello.

Por supuesto, el más divertido al haber oído las palabras de Kisho había sido Itachi, quien no pudo reprimir una risilla que llamó la atención de los presentes. Por supuesto, Karin y Sasuke prácticamente lo fulminaron con la mirada.

−¿Qué es tan divertido tío? –preguntó verdaderamente confundido.

−Nada, sólo recordé algo divertido –sonrió Itachi acercándose a su sobrino− ¿Por qué no vamos por tus regalos para guardarlos en el auto?

−¡No! Yo quiero quedarme con mamá –se aferró al brazo de Karin haciendo un puchero.

−Vamos Kisho, sólo será para guardar tus regalos –se puso en cuclillas a la altura del niño− Ya estuviste con tu madre todo el día, y tu papás tienen mucho que hablar, recuerda que tampoco se han visto desde hace tiempo –puso una mano sobre la cabeza de Kisho− Regálales diez minutos, ya luego vuelves con tu madre.

Kisho se agarró aún más fuerte del brazo de su madre negándose rotundamente, a lo que Itachi ya no supo cómo convencerlo. Cuando Karin estuvo a punto de hablar, Sasuke le arrebató la palabra.

Padre solteroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora