Capítulo 18 🥀 Animal

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Observo al hombre que tengo enfrente, el rostro de la persona que me ha estado amenazando últimamente, el mismo individuo responsable de la muerte de mi madre

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Observo al hombre que tengo enfrente, el rostro de la persona que me ha estado amenazando últimamente, el mismo individuo responsable de la muerte de mi madre.

— ¿Nos acompañas, hijo? — Trato de ocultar mi sorpresa al escuchar esa palabra, evitando mirar nuevamente al chico que me sigue de cerca, Alek.

— No, gracias — responde de manera brusca mientras se da la vuelta y se aleja.

Lo observo, no con decepción, sino más bien con súplica, sintiéndome completamente diminuta junto al Vor.

— Vamos, querida — dice mientras coloca su mano en la parte baja de mi espalda.

Me guía a través del bar, mientras las miradas curiosas de todos se posan sobre nosotros. Evito bajar la cabeza y aparentar debilidad.

Llegamos a un sofá frente a una jaula. El Vor se sienta y me hace sentarme sobre su rodilla.

— Te recordaba más habladora — comenta apoyando su mano sobre mi muslo —. Tu padre y yo entrenábamos juntos, lo conocía desde hace muchos años.

Lo miro de reojo, confirmando que puede tener la misma edad que mi padre y que lo que dice probablemente sea cierto, nunca conocí a los hombres que trabajan para mi padre, o al menos, si los conocí, no los recuerdo.

Llevo mi mano al cuello, buscando el collar que me regaló, y un escalofrío recorre mi cuerpo al darme cuenta de que no está.

— Siento su pérdida — responde él.

— Mi padre no...

Me callo cuando las luces del bar se apagan por completo y la pareja de la jaula abandona su lugar.

Frente a mí, reflejada en un proyector, aparece la imagen de mi coche destrozado, Enzo sosteniéndome en sus brazos y el cuerpo de mi padre carbonizado.

Llevo mi mano a la boca, conteniendo un sollozo, y siento cómo el aire abandona mis pulmones. La oscuridad de la sala me hace sentir asfixiada.

— Nadie vendrá por ti — susurra el Vor en mi oído —. Tu padre murió por ti, esa explosión fue exclusivamente para ti.

Mi estómago se tensa y siento un nudo en él, mientras las lágrimas empiezan a brotar de mis ojos de forma incontrolable. Incapaz de apartar la mirada, las imágenes se graban con crudeza en mi mente. El eco de las risas de los hombres en el bar retumba en mi cabeza, como si se burlaran de mi dolor, mientras observo el desgarrador panorama del cadáver de mi padre, consumido por las llamas.

— Dado que el destino te ha brindado otra oportunidad... — continúa mientras acaricia mi muslo — Espero que sepas aprovecharla y que alguno de mis hombres encuentre tu compañía irresistible.

Me giro al escucharlo terminar esa frase, reprimiendo las ganas de golpearlo, consciente de que estoy en su territorio y de que papá no vendrá a rescatarme.

"Eres fuerte, eres como tu madre", cierro los ojos por un momento, intentando controlar mi respiración mientras recuerdo las palabras de papá.

Alguien agarra mi brazo con fuerza y vuelvo a abrir los ojos, girándome hacia la persona: Alek.

— La llevaré para que se prepare — dice, tirando de mí.

— Todos están ansiosos por ver de lo que eres capaz — se ríe el Vor, apoyando sus brazos en el respaldo del sofá.

Las luces del bar se encienden de golpe y todos me miran con diversión.

— Quiero mi collar — digo.

— Deberías preocuparte por salir viva de aquí y con esa actitud... — responde él.

Me lleva de vuelta a la misma habitación de antes y cierra la puerta tras de sí.

Debo sobrevivir, no debo luchar.

— ¿Qué se supone que debo hacer ahora?

— Exhibirte, baila, habla, cualquier cosa que pueda provocar alguna erección.

Suspiro mientras me observo en el espejo, intentando arreglarme el pelo de la mejor manera posible. Lo peino hacia delante, cubriendo parte de mi pecho desnudo.

«Sé bailar, fui entrenada para eso, puedo seducir a cualquier hombre».

— Quiero bailar — digo.

A través del espejo, observo a Alek, analizando si sería posible seducir al hijo del Vor, pero descarto esa idea al ver su mirada sobre mí.

En ningún momento me ha mirado con deseo, no tiene la misma mirada que los demás hombres.

— ¿Cómo sabré si alguien me ha elegido?

— Informarán al Vor.

— ¿Y tendré que entrar en la jaula?

— La jaula es el último paso — responde, apoyándose en la pared y cruzando los brazos sobre el pecho — ¿No te parece algo propio de animales?

Me enfrento a él, girando mi cuerpo con confianza, mientras avanzo hacia su dirección con pasos decididos. En mi mente, repaso cada lección aprendida, dejando que la sensualidad fluya a través de cada movimiento de mis caderas, preparándome para mi mejor actuación.

Con suavidad, dejo que mi mano repose en su hombro, acercándome a él. Con sutileza, me elevo ligeramente sobre las puntas de mis pies, rozando mi rostro cerca de su oído.

— Quizá yo también sea un animal — susurro con voz dulce antes de estirar el brazo y abrir la puerta.

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𝘊𝘰𝘮𝘦𝘯𝘵𝘢𝘳𝘪𝘰 𝘥𝘦 𝘢𝘶𝘵𝘰𝘳𝘢

¡Hola bombones! 🖤 Capítulo corto, lo sé, no me matéis jajaja tengo una explicación:

Habrá otro capítulo extra hoy, he decidido separarlos por narrador, ya que estéticamente me parece que queda mejor, aunque eso me lleve a que la historia tenga más partes.

Por otro lado... tengo una pregunta: Dentro de varios capítulos tengo que escribir palabras en ruso, preferís que use alfabeto cirílico (estas letras: вбкфх) o que lo traduzca para escribirlo con el alfabeto latín, el nuestro.

Lleva algo más de trabajo, pero como lectora, siendo sincera, me gusta pronunciar todas las palabras que leo, aunque no las entienda.

Decidme lo que prefiráis 🖤

Decidme lo que prefiráis 🖤

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LORETO © COMPLETADonde viven las historias. Descúbrelo ahora