El frío de finales de otoño hizo que el hombre terminase con la nariz roja cuando entró al edificio.
Saludó a la secretaria, y en cuanto entró al ascensor, su mano derecha, y subjefa, entró con él antes de que las puertas se cerrasen.
– Ha llegado una carta para tí que no es de pagar.
– Qué graciosa Koala.
– Oh, venga ya, a veces estás demasiado serio. Toma, lee la carta.
– Está bien. Por cierto, necesito que llames a Robin, la semana que viene tengo una reunión con una historiadora que va a venderme un producto estrella, y ella sabrá decirme si es real o no.
– Puedes llamarla tú, soy subjefa, no tu secretaria.
– Ya, pero tú eres su novia.
– Oh, venga ya, no es justo. Cuando le toca a Yamato, también la llamo yo, y tú eres su cuñado.
– No soy el preferido - salieron del ascensor en su nivel.
– ¿De qué es la carta?
– Mi abuelo, se casa en dos semanas. Toma, necesito encontrarle un marco.
– ¿A la invitación?
– Así se piensa que lo quiero tanto que enmarco su invitación a una boda que estaba obviamente invitado.
– Idiota.
– Se llama estrategia. – sonrió y entró a su despacho dejando a la pelirroja afuera.
– Me gustaba más el Sabo de hace dos años. Irritable, pero al menos se escondía.
– ¿Problemas en jefatura?
– Hack, la próxima que te aparezcas así, pienso cortarte el cuello con una mano. Sabo es idiota.
– Hace mucho que no folla.
– Yo creo que es virgen aún Hack. Le haría bien una noche de fiesta. ¿Cuándo fue la última vez que salió de ocio?
– Hace dos años. En la graduación.
– Ya es hora de que salga. Prepararé algo.
En otro lado, una chica corría escaleras abajo. Tropezó en el último escalón, y se pegó con el suelo.
– ¡Tn! ¡Desayuna antes de irte! – Makino salió de la cocina encontrando a su hermana en el suelo – Eres la cosa más torpe del mundo.
– Lo sé, gracias.
– Por cierto, nos ha llegado una carta.
– ¿No has pagado ya algo?
– Es de Dadán.
– ¿Dadán? – Tn se levantó rápido – ¿Ha pasado algo? ¿Por qué escribe por carta?
– Es una invitación, ¡nos vamos de boda! – Shanks tomó a su cuñada de la cintura para elevarla.
– Baja graciosillo.
– ¿Te dan miedo las alturas? – preguntó cuando la bajó.
– Me das miedo tú.
– Venga ya Tn, ya son muchos años de relación.
– Por eso no confío en tí, porque ya son muchos años.
– ¡Makino!
– Deja de llorarle a mi hermana.
– ¿Y bien? ¿Qué piensas de la boda? – Makino la miró curiosa.
– Habrá que comprar un vestido, supongo. Hace mucho que no tengo uno, ni siquiera sabré como ponérmelo. Y por no hablar de los tacones.
– Piensa que el vestido y los tacones también te vendrán para la graduación. – animó su hermana.
– Y si no engordas, para nuestra boda. – Shanks revolvió el pelo de la pequeña.
– Aún queda mucho para que acepte.
– ¿Quién? ¿Tu hermana o tú?
– Yo, obvio. Soy su defensora.
– Tn, ves preparándote. Las parejas empiezan viviendo juntos, luego viene la boda, los mini Shanks...
– ¿Más como tú? ¡No! ¡No! Me niego.
Sophie entró corriendo a la casa – ¡Tn! ¡Llegas tarde a clase!
– Es verdad. Pillaré una bolsita de galletas para el camino. – corrió a la cocina, tomó una pequeña bolsa de galleta en forma de dinosaurios, salió, besó la mejilla de su hermana y su cuñado y salió pitando. – Os quiero, adiós.
Makino y Shanks se miraron divertidos.
– El cinturón.
– Sí, sí, lo sé. Arranca, corre, debo llegar.
– Tranquila, la clase empieza a y media. Aún quedan cuarenta minutos.
– Por cierto, ¿sabes que vamos de boda?
– ¿Shanks y Makino al fin se casan?
La ilusión de Tn se fue enseguida – No.
– Vaya.
– Dadán y Garp.
Sophie la miró extrañada, pero pronto miró a la carretera.
– Tendrá que ser una boda preciosa. ¿Crees que pondrá billetes de cien como papel higiénico o eso se lo reserva para él?
– ¿Aún sigues con eso? Sophie, estás loca.
– Soy tu mejor amiga, un respeto.
– ¿Respeto?
– Busca el significado si no te lo sabes. Vamos, busca busca.
Tn se rió.
La invitación estaba llegando a sus destinatarios.
Tiempo de espera: 2 semanas.
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Calor en invierno - Contratiempo 2 (Sabo)
FanfictionTras dos años, una boda importante hace a Sabo volver. Es entonces cuando vuelve a verla. Es entonces cuando sabe que tiene solo dos semanas para volver con ella, para que ella quiera volver con él. Pero esta vez no es tan fácil.