Calor en invierno - Contratiempo 2 (Sabo)

11 - Famosos

– No, solo debo presentarme a dos exámenes, por lo tanto, no estoy preocupada. He trabajado muy bien estos cuatro años, he presentado trabajos que subían nota y los proyectos de cada asignatura para así no presentarme a sus exámenes. Además, todos han dicho que mis prácticas con los pequeños han sido de diez.

Ella sonreía emocionada mientras hablaba con él en la puerta de la mansión.

– Me alegro por tí Tn-ya, estoy seguro de que saldrás con matrícula de honor y un buen trabajo.

– Soy precavida, no inteligente. Además, tú vas mejor que yo. Las últimas prácticas fueron las que te dieron nota de diez en cinco asignaturas. Ya las tenías, pero te quedaban esas, y ¡mírate! Estoy orgullosa de tí Law.

Él sonrió de lado. – Gracias Tn-ya.

– No las des.

– Ahora que vives aquí por un tiempo, sabes que sigo aquí para lo que necesites.

– Gracias Law.

– ¿Duermes bien?

– ¡Sí! Sabo ha sido muy amable conmigo desde ayer. Hasta me ha dejado su pijama preferido, y me ayuda también con los preparativos de la boda. Ayer me ayudó con los planos de la casa del jardín. Jo, me encantaría que pudieras venir a la boda conmigo, estoy segura de que te gustaría.

– ¿Qué tal vas con lo del vestido?

– ¡No te lo vas a creer! Garp y Pops me compraron uno. ¡Es precioso! Parezco una princesa. Ayer me arriesgué a probármelo cuando todos estaban abajo desayunando. Me hice la dormida claro, por eso bajé tarde a desayunar. ¡Pero al menos lo hice! Y he decidido que será el vestido que siempre me pondré. Para la boda, la graduación, la boda de mi hermana cuando Shanks se lo pida, y lo que venga. Aunque... me siento mal, no me gusta que gasten por mí.

– Eso es solo una pequeña parte de lo que te mereces.

– Vas a hacer que me sonroje Law, no valgo tanto. – se echó un mechón de pelo detrás de su oreja nerviosa.

– Creo que sí, no te subestimes tú sola. Bien, es hora de irme, tengo mucho que estudiar.

– ¿Ya? Aún es muy temprano. Bueno, prométeme que la próxima iremos a tomar unas tortitas juntos.

– No me gusta el pan y tú amas los gofres.

– Aún hay muchas cosas que seguro que te encantara. Frieda sirve muy buenos platos en su cafetería.

– Está bien, te lo prometo. Si no es ahora, será para verano.

– ¡Gracias Law! Cuídate en el camino, y avísame cuando llegues. ¡Ah! Y mándale saludos a Bepo de mi parte, seguro que me echará de menos.

– Ya lo creo. Adiós Tn-ya.

Ella se despidió con una pequeña sonrisa.

Al entrar se encontró con Zoro que tenía los brazos cruzados y negaba con la cabeza.

– No, no, lo estás haciendo todo mal.

– ¿El qué?

– Verte con Law en la casa de tu futuro novio.

– ¿Qué tiene de malo ver a mi mejor amigo en la puerta de la casa de mi...? ¿De mi qué? – al darse cuenta de la última parte, se sonrojó.

– ¿Mejor amigo? ¿Eso Law lo sabe? Porque lo vi decidido cuando dijo que era tu novio.

– No tengo novio, ni tengo planeado tener, ¿vale? Mi plan es rápido y conciso: acabar la carrera, y trabajar para poder independizarme y ser una carga para mi hermana y su novio.