En un suspíro

Capítulo 20: Esta bien

Capítulo 20: Esta bien

Pov Alex

Consolar por la noche a Babi me dió bastantes puntos frente a mí objetivo. La verdad es que me sentía un poco rastrero por tratarla como tal, pero al fin y al cabo me estaba viniendo bien que Billy hubiese metido tanto la pata en el asunto.
Me levante pronto, el calor no me dejaba dormir. Hacia ya dos días que avisaron de la fuerte ola de calor que azotaría nuestra ciudad, pero pensé que sería más llevadero. Abrí el armario y me puse un bañador rojo, cogi las chanclas y la toalla y me dispuse a bajar hasta la piscina. Al pasar por el salon vi como el termómetro marcaba 38° grados, lo que me dió más ganas aun de meterme en el agua congelada.
Al salir vi que no fuí el único que había tenido esa idea.
Barbara salia del agua en ese momento, haciendo fuerza con sus brazos para impulsarse en la orilla. Nunca la había visto con tan poca ropa, pero he de decir que si ya tenía antes calor ahora tenia el triple como mínimo.
Mil formas sucias de pensar sobre ella pasaron por mi mente, pero las aparte rápido. Babi llevaba un bikini de dos piezas negro, cuya parte de abajo dejaba poco a la imaginación y la parte de arriba marcaba sus preciosos y grandes pechos a la perfección. Tenía el cuerpo más bonito que había visto en mi vida, digno de una revista, el cual estaba recorrido por su preciosa melena, lisa y mojada, lo que la hacia aun más irresistible.
Me obligue a reaccionar después de medio minuto, observando como disfrutaba del baño matutino. En ese momento ella me vió, y avergonzada corrió a la hamaca y se cubrió con su toalla.
-Tranquila - su cara era de auténtico terror - no he visto nada que no halla visto antes- y sin ninguna duda mentí, pues no dejaba de observar su precioso cuerpo, deseando tenerlo entre mis manos.-Perdona si molesto, no era mi intención - ella pareció relajarse y se sentó en la esquina de la hamaca.
-Es solo que no estoy acostumbrada a que me vean con tan poca ropa - me pareció adorable como sus mejillas se sonrojaron, así que decidí jugar un poco con la situación. Sonreí de aquella forma que sabía que ella odiaba, lo más egocentricamente posible. Ande hasta el asiento contiguo al suyo y deje mi toalla antes de deshacerme de mi camiseta. Triunfante, vi como después de observarme detenidamente apartó su mirada, más avergonzada aun si cabía.
-Ya estamos en paz - dije antes de correr y zambullirme en el agua. De esta forma oculte mi erección y trate de calmarme un poco.
Más que extrañado, me sorprendí al ver que ella salto detrás de mí a la piscina, al parecer yo no era el único que quería jugar.
-No sabes ni tirarte desde una piscina - me reí de ella.
-Y tu no sabes lo que dices-dijo mientras se ponía boca arriba haciendo el muerto, algo que elevó su pecho aun más. Si se podía ser más irresistible que alguien me dijese como.-Yo me he tirado desde el acantilado Ragged Point miles de veces.
-¿En serio?-pregunté realmente sorprendido. Sólo un loco lo haría, puedes tener la mala suerte de quedarte en el sitio si lo haces, pero ahora que lo mencionaba si que había oído que muchos de los de la zona este de la ciudad lo hacían para soltar adrenalina. Estaban locos.
-Por supuesto - respondió Babi - fue mi prueba de iniciación.
-¿Tu que?-ella río al ver mi cara de extrañeza.
-La gente de Cubierta tiene muchas cosas que desconoces.-con saber que eran idiotas me valía, pensé, pero el tema de conversación me pareció interesante-para ser uno de ellos te imponen pruebas que tienes que pasar, no basta con encajar.
-Es la mayor idiotez que he oído - respondí sin pensar.
-Puede, pero te aseguro que resultó divertido. Nunca había tenido tal subidón de adrenalina.
-Ni tanta perdida de neuronas - ella puso una falsa cara de indignación y me golpeó con un puño en el brazo. Yo reí por la poca fuerza que tenía.-Es como si fueseis una especie de secta.
La subí a mi hombro con una de mis manos y se puso a patalear y a gritar que la bajase. Sis dudarlo aproveche la situación para tocar su pompis disimuladamente, cubierto por una fina capa de bikini.
Finalmente consiguió bajar de mi hombro y me rozó donde no debía sin querer. Como una niña pequeña se tapó la boca para reír, como si hubiese descubierto algo prohibido. Yo me avergoncé.
-¿Estas...?-preguntó mirándome la entrepierna. Yo reí para bajar la tensión.
-¿Tanto te sorprende?-pregunté aun avergonzado.
-Un poco si. No entiendo mucho de hombres pero no se...-y yo claramente alucine en colores al descubrir con aquello que Babi no creía ser realmente atractiva.
-Pues te puedo asegurar con toda certeza que nunca antes me había pasado así de fácilmente con ninguna otra - me acerque a ella poco a poco.
-No entiendo porque - continuó mientras se encogía asustada.
-¿Debería enumerarte las razones?-susurré sobre su oído una vez a su lado. Notaba su respiración entrecortada.
Me miró a los ojos, levantando su mirada hacia la mia, era el momento de hacerlo. Sus preciosos ojos me miraron y sus labios, tan perfectos y carnosos se entreabrieron, pero yo me detuve al ver que estaba asustada y me lo tome con más calma.
-Eres tan preciosa que duele - recogí un mechón de su pelo detrás de la oreja y acaricié su mejilla.
Esta vez ella reaccionó. Apartó mi mano de su cara delicadamente.
-No puedo hacerlo - se dió la vuelta para marcharse pero la detuve.
-Dime porque - me puse en su camino.
-Tengo miedo de que me utilices o de que juzgues mi cuerpo.
-Jamás lo haría - dije negando con la cabeza.
-No puedo confiar en tí - estaba asustada, vi el terror de volver a sentirse abandonada en sus ojos, pero no estaba dispuesto a perderla.
-Dejame demostrartelo-me miraba confusa, sin saber que hacer-Prometo no hacerte ningún daño, pero si no me dejas no puedo demostrartelo.
-Esta bien - respondió, pero salió de la piscina, corriendo a taparse con su toalla. No digo que fuese ni malo ni bueno, pero ella parecía avergonzarse de su cuerpo, no querer que la viese ni la tocase nadie, algo que me preocupaba bastante.

Pov Janet

-Así que al final lo has conseguido-dijo Sheyla una vez termine de contarle mi encontronazo con Billy.
-No buscaba conseguir eso-esta estúpida nunca se enteraba de lo que la decía - lo único que busco es hundir a Babi, no tirarme a Billy. Eso sólo ha sido un entretenimiento que al parecer va a durar un tiempo.
-Pues ahora que ya no se hablan lo veo difícil-contesto ella mientras se miraba las uñas.
-Idiota, no te enteras de nada - le eche en cara, me ponía de los nervios tener que explicarle todo - Babi también quiere a Billy aunque aún no se de cuenta. Sólo es cuestión de hacer que parezca que él la ha olvidado para que yo entre en escena y me haga pasar por novia de Billy.
-Eso simplemente la pondrá celosa
-Eso - grite cabreada por su interrupción - es lo que hará que se aleje de su nuevo entretenimiento, el tal Alexander, y de esa forma Woody podrá actuar mejor.
-¿Qué quieres decir?-sonreí con suficiencia.
-Esperaré el tiempo necesario para hacer que ella se enamoré tanto de Billy como de Alex, y una vez confusa por sus sentimientos Woody la utilizará, hundiendola en la miseria.

Pov Laura

-A tu madre se le olvido mencionarme que jugabas al fútbol - Joe me miró sorprendido. Esta tarde Babi tenía el último partido de la temporada, y la final estatal. Tanto Joe como Alex insistían en ir a verlo a pesar de que mi hija odiaba que fuesen a verla. La podía la presión de que la juzgase gente conocida y las cosas acababan saliendole mal.
Por mucho que insistí ambos montaron en el coche de camino al estadio. Por el retrovisor vi como mi hija no estaba contenta con el resultado.
-Nunca te he visto jugar pero he oído hablar mucho de ello-dice Alex ilusionado. Al parecer él solo juega al fútbol americano.
Babi se queda callada, aun cabreada.
-Alegra esa cara mujer - la anima Joe desde el asiento del copiloto, pero ella le ignora y baja del coche hacia los vestuarios sin decir una palabra.
-Se siente presionada-les digo a ambos, que andan hacia los asientos desilusionados.
El partido no tardó en comenzar, y Babi, como capitana, también era central, una joven promesa en el deporte.
El partido finalizó con el marcador mostrando 4-0 a nuestro favor, siendo Babi quien marco tres de esos goles. Me sentía orgullosa.
Corrieron por el campo y los espectadores del instituto se unieron a la celebración.
Mientras Alex corría allí Joe y yo nos quedamos atrás esperando a la entrega de premios.

Pov Billy

La prometí que jamás me perdería uno de sus partidos, y no pensaba romper esa promesa. No quise dejar que me viese, sólo espere hasta el final para asegurarme de que todo le salia bien. Estuvo increíble, como siempre.
Me entró la tentación de acercarme más a ella, pero cuando me dispuse y apenas estaba a diez metros de distancia alguien llamo su atención por la izquierda.
Miré y ahí estaba ese cabronazo de Alex, luciendo una sonrisa.
Ella se giró de inmediato, soltando el pelo de su coleta y corriendo hacia él, saltandole encima mientras este la cogía y la abrazaba.
Apreté los puños al ver como se miraban. Estaba claro que había perdido.
Sin poder contenerme más me di la vuelta y me marche de allí para no tener que seguir viendo lo que había perdido.