La llegado de Freya a la pizzería fue tan ruidosa como su estadía en el reformatorio.
Llegó en un Ford Mustang GT de color vinotinto como mi sueter.
Parecía no saber conducir muy bien porque se llevó entre tres a cuatro conos, se subió en la acera, casi se lleva un aviso y a un perro junto a su dueño.
-¡Oye bestia sube! -exclamo desde el coche el cual le sonaba demasiado el embrague-. Apresúrate, no se manejar muy bien en manual.
-¡Se nota! -le grite y corriendo hacia el coche.
-¿Que me tragiste? -me preguntó al ver la bolsa en mi mano una vez me subí al coche.
En ese momento el coche se nos freno de golpe.
-Mejor dejame manejar a mí antes de que nos mates a ambas -dije poniendo mis manos en el volante con una sonrisa fingida y créanme la mía exagera.
Ambas bajamos del coche y cambiamos de asiento, está vez era yo de chófer y ella de copiloto.
-¿Sabes manejar cierto?
-Nnnop -dije examinando mi asiento-. Solo lo leí en los libros de mecánica del reformatorio ¿Que tan difícil puede ser?
-Ay San Benito, déjame un puesto bonito junto a San Pedrito -dijo Freya persinandose.
Recorde en ese instante todo, pedal de la izquierda era el embrague, pedal del centro el freno, pedal de la derecha acelerador.
Para arrancar tengo que pisar el embrague y luego pisar suavemente el acelerador e ir soltando lentamente el embrague hasta el punto de que el coche alcanzará las revoluciones que necesitaba.
-¿Me sale natural, Eh? -le dije a Freya.
-¿Solo lencería y tangas? -me pregunto ella-. ¿Enserio Camile? Con una tanga de estas me puedo limpiar los dientes.
-Con un gracias bastaría -dije haciendo un cambio.
-Conduces muy despacio.
-Lo dice la que no sabe manejar en manual, recuerda que es la primera vez que manejo un coche.
-Y yo me llamo Freya -musito.
-¿A dónde vamos? -pregunté.
-Pa' la caja -dijo con acento cubano.
Una de las tantas cualidades de Freya era que ella le gustaba imitar acentos y siendo sincera le sentaban muy bien.
-¿Y dónde queda esa famosa casa? - pregunté pasando cerca de una patrulla de policías.
-Pues primeros tendremos que ir al puerto, dame las gracias que estaba por este lugar haciendo un trabajo -comento.
Mire el retrovisor y vi que el coche de policías nos seguía desde la distancia. No me alarme ni nada, solo me mantuve tranquila y seguí mi camino.
-¿Sí? ¿Que tipo de trabajo? -le pregunté sin despegar la vista del retrovisor.
-¿De donde crees que salió este precioso? -inquirio-. Se lo quite a un niño rico de esta zona.
-Pues creo que este precioso tiene localizador -dije acelerando un poco más-. Tenemos un pequeño conocido detrás de nosotras.
-¡No me jodas! ¿Enserio? -pregunto viendo hacia atrás.
-Ponte el cinturón e encomienda tu alma a San Pedro
-¡Ay San Felipe que está loca la vida no me quite! -exclamo poniéndose el cinturón.
Aceleré un poco más para adelantar a un camión y luego dar una vuelta hacia un callejón que daba a otra calle.
-¿Puedes más que sea revisar dónde está localizador? -le pregunté intentando no llevarme un contenedor de basura.
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Camile Encanto De Tiburón
ParanormalSIPNOSIS: Una Isla con un gran misterio. Una chica con su vida destruída. El odio a una persona que cada día crecía más y más. Solo una cosa se interpondrá entre Camile y su destino. Él... ¿Logrará conseguir lo que quiere sin que nadie salga lastima...