Tinta y pergamino

Capitulo 31

Una vez que los setos se cerraron detrás de ellos, cualquier sonido de la multitud fue bloqueado, dejándolos de pie en un silencio espeluznante. Era demasiado oscuro para ser natural. Las sombras eran casi opresivas, incluso para Eliza, que había pasado la mitad de su vida en la oscuridad. Eliza y Tom lanzaron un lumos mientras caminaban por el camino hasta que llegaron a la primera bifurcación en el laberinto. Los setos eran altos, se extendían hacia el cielo y bloqueaban cualquier señal de la multitud más allá de ellos.

"¿Nos vemos al otro lado?" Eliza preguntó girando hacia la bifurcación derecha mientras Tom tomaba la izquierda.

"No si llego primero"

Y luego se separaron, caminando por caminos separados.

El laberinto era mucho más espeluznante sin Tom a su lado y trató de mantenerse lo más lejos posible de los setos. Tenía la extraña sensación de que las hojas se extendían para agarrarla. No podía escuchar nada más allá de sus propios pasos, suelas de cuero crujiendo la hierba seca bajo sus pies. Barty les había dicho que no habría nada demasiado peligroso en el laberinto. El objetivo era que Eliza llegara a la copa después de todo. Pero eso no llenó exactamente a Eliza de confianza. Tampoco había querido haber nada demasiado peligroso en el lago y, sin embargo, mira en qué había nadado Eliza.

Finalmente llegó a otra bifurcación en el laberinto. Susurrando un rápido "apuntarme", decidió tomar el tenedor derecho nuevamente solo para tropezar cuando casi entró en los tornillos de Hagrid. Maldiciendo, se inclinó hacia atrás debatiendo qué hechizo usar para eliminarlos. Sus proyectiles eran prácticamente impenetrables, lo que los hacía tan molestos de manejar. Ella no estaba diciendo que ella y Draco realmente habían probado esa teoría, pero definitivamente había habido una lección en la que Hagrid los había dejado sin supervisión. Realmente debería haber alentado la curiosidad de sus estudiantes.

Eliza intentó un knockback jinx y luego un stupeefy, pero cada jinx fue fácilmente desviado por los Screwts rock hard shells. En lugar de continuar maldiciéndolos infructuosamente, Eliza lanzó un rápido 'alerte ascendare' y simplemente saltó sobre las malditas cosas y continuó su camino.

Fue entonces cuando se encontró con una niebla bastante extraña que bloqueaba su camino por el laberinto. Había una intersección cerca de ella que le permitiría desviarse de su camino elegido, pero la forma más rápida de llegar a la copa era a través de la extraña niebla. Lanzando una miríada de hechizos de detección, determinó que no era nada que pudiera dañarla, simplemente una magia de ilusión.

Eliza dio un paso adelante vigorizante.

El mundo se extendió a su alrededor durante unos segundos discordantes y cerró los ojos de golpe. Cuando los abrió de nuevo, descubrió que el cielo estaba debajo de ella. Estaba parada boca abajo en el suelo.

Decir que fue alucinante sería quedarse corto.

Eliza decidió morder la bala y avanzó arrastrando los pies. Ella no cayó al suelo (¿cielo?) y así cargó hacia adelante. Era como cuando hacía un rollo cuando estaba volando, la hacía sentir vagamente náuseas. Se sintió extremadamente aliviada cuando finalmente salió de la niebla y el mundo volvió a los derechos.

Pasó unos minutos más tejiendo silenciosamente a través del laberinto continuando dirigiéndose hacia el noroeste hasta el centro del laberinto antes de encontrar cualquier otra cosa. Acababa de doblar una esquina cuando casi tropieza de cabeza en su habitación en el orfanato.