bruja arcana

capitulo 12

Narrador

Decir que el cierre de 1991 fue caótico fue poco, pero ahora ya todo parecía estar en aparente calma, en esta ocasión Lilian se encontraba en los jardines del aquelarre, recogiendo un par de pétalos de distintas flores, después de todo el año dio a inicio y ella ya tenía 12 años, cada vez su cuerpo se modificaba más a el de un adolescente y su madre le recomendó dejar las cosas preparadas tanto para ella como su compañero quien también se vería afectado por los cambios de esta etapa.

Los malfoy estaban en una cabaña junto a severus, draco fue a su práctica de quidditch por lo que solo los adultos estaban en el lugar.

- entonces... lo que dices es cierto severus – consulto Lucius

- A que parte te refieres Lucius – comento severus mientras tenía la vista fija en las anotaciones que su hija dejo sobre la maesa.

- eres ... padre de Lillian, la prometida de mi hijo. - comunico Lucius

- mi no es el peor chico que pudo elegir Si... a un que no me agrada la idea que mi hija se case con ahijado ... entre todo. – comento con sarcasmo severus

Lucius y Narcisa solo lo miraron, la vida sí que daba vuelta, tantos años Lucius se esforzó por pertenecer a las arcanas y ahora resulta que la hija de su mejor amigo es una, la prometida de su hijo y para colmo cabía la posibilidad de que su propio amigo lleve la sangre arcana en sus venas.

- En eso tengo que contradecirte Lucius- expreso severus mientras levantada la mirada de los apuntes dejando en claro que leyó su mente- resulto sorprendente incluso para mi que los prince tengan algo que ver con la dinastía arcana

- bueno en eso tienes razón papa los prince no tienen que ver con la dinastía arcanamenciona Lillian entrando a la cabaña ya con la canasta llena de flores- de hecho, la dinastía arcana dejo de existir hace muchas generaciones, actualmente somos más un tipo de religión o secta como llaman los muggle, una en la que eres reclutado y no a la que eliges por elección propia.

- Ya veo... tienes todo lo que necesitas para tu hechizo mi niña.

Lillian solo se sonrojo al escuchar esas palabras, siempre quiso saber lo que era tener un padre y bueno ... ahora que lo tenía le costaba bastante él no estar abrazándolo y reclamando atención constante... ahora entendía el por qué decían algunos textos que las hijas mujeres eran más propensas al ser posesivas con sus padres.

- sí... ya tengo todo para el hechizo, después de todo el collar que le dieron a draco no tiene la efectividad que necesita - Lillian se sienta en el piso, toma lugar en la pequeña mesita de té – a comparación del peligro que corre no solo por estar en Hogwarts sino por ser mi primer amante el collar de protección y propiedad que se le fue dado es completamente deficiente para mi nivel de magia, dentro de poco nuestros cambios físicos serán más notorios y con ello el despertar de la magia roja de todas las brujas de mi generación... además la idea que una insignificante bruja de otro aquelarre, intente tomarlo como suyo debido a la preparación que le doy me hierve la sangre.

Nadie dijo una sola palabra, ciertamente era muy extraño escuchar a una casi adolescente hablar de esas cosas, Narcisa fue la única con el valor necesario para preguntar.

- ¿a qué te refieres con ser tomado o la preparación que le das... pequeña? - pregunto Narcissa sin estar segura de querer escuchar la respuesta.

Lillian la miro durante unos segundo debido a que estaba pensando el cómo trascribir su oración a algo que ellos comprendan... y no sufrir de vergüenza ante su padre.