YOU BELONG WITH ME | BILLY HARGROVE

022

J | JAMES BYERS.

A pasado una semana desde que Billy y yo ya no somos más pareja de trabajo. Las cosas entre nosotros se han distanciado a causa de que él volvió con su grupo de tontiamigos.
Me había acostumbrado a su compañía y su presencia, pero intentaba no demostrar que "lo extrañaba".

—¿En que tanto piensas?-Pregunto Rosier.

Estábamos en la hora de lunch, y Rosier decidió hacerme compañía. Ambas estábamos encima de el cofre de el auto de mi mellizo.

—Nada... Es solo que.-Me interrumpió.

—Extrañas a Hargrove.-Dio una pequeña sonrisa.

—No.-Rodé los ojos.—¿Por que lo extrañaría?

—Eran inseparables.

—¿Que?

—Todos pensaban que ambos salían, pero descartaron eso al ver que él y Maddy la porrista salían mucho en fiestas. Además que se la pasaban besándose en cada esquina que encontraban. Por otro lado no creían muy posible que a Billy le gustases tú, y cómo te vieron en una cita con Mason...

—¿Maddy y él salen?-Pregunte.

—No. Al menos no formalmente, son pareja de sexo solamente.

—Ya...-Asentí lentamente.

—¿Te importa si salen o algo?

—Para nada.-Sonreí levemente.—El sabe que hacer con su vida.-Me encogí de hombros.

—¿Que tal tú y Mason?-Pregunto cambiando el tema.

—Tendremos nuestra segunda cita la próxima semana.-Di una leve risa.—Es increíble.

—Diría que asombroso. He visto cómo te mira y cómo te trata, sinceramente estoy celosa.

—Oh, puedes tener al pequeño Philips contigo.

—¿Derek?-Ladeo su cabeza a un lado. Yo asentí dándole a entender que sí.—No, el no es mi tipo... Eso creo.

—El es tierno, amable y atractivo. No muy diferente a Mason.

—¡Lo se! Pero, no creo que lo nuestro funcione.

—Creí que ya salían.

—¡No! Ósea, si nos besamos una que otra vez y tuvimos sexo en una que otra fiesta...-Dejó de hablar al ver mi rostro con sorpresa.—Oh... Eso no lo sabias, ¿cierto?

—No habló mucho con Derek, no desde que me hice "amiga" de Hargrove.

—Uh... Bueno, ahora lo sabes.-Dio una risa nerviosa.

—Muchos detalles.

—Lo siento.

—Está bien.-Baje de el cofre y Rose hizo lo mismo.

—Viene tu chico.-Dijo mirando detrás de mi.

—B- Mason.-Sonreí al ver a el chico.—¿Que haces aquí?-Extendí mis brazos para abrazarlo.

—Pasaba por aquí, quise venir a verte.-Me abrazo con fuerza. Se separó de mi y miró a mi amiga.—Oh. Hola, Rosier.-Saludo.

—Hola, Mason.-Saludo la chica, devuelta.

—¿Las acompaño a clase?-Pregunto.

—Por supuesto.-Dije.

—Yo primero iré a busca una cosa a el auto de mi mamá.-Dijo Rosier.—Los veo.-Se fue hacia otro lado.